tag:blogger.com,1999:blog-10828100629196592602024-03-12T20:36:20.031-07:00Fantasy or RealityEugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.comBlogger16125tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-17633891054884128832014-05-03T22:00:00.001-07:002014-05-03T22:00:21.119-07:00Déjalo ser cuando se trate de amorDrew.<br />
-¿Qué tan rápido lo puedes hacer, Drew? -inquirí distraída entre los papeles.<br />
-Depende de cuánto tardes en estar lista.<br />
Levanté la vista sin entender, y me encontré a Drew muy encima mío, me sonrojé sorprendida por su despreocupada manera de tratarme. Drew acercaba su cuerpo y hacía que los papeles entre nosotros se arrugaran. <br />
No le importó. <br />
Solo miraba mis ojos fijamente, y parecía ser de lo único consciente. Su mirada atrapando la mía. Lo demás, era pura agua corriendo naturalmente.<br />
No parecía consciente de sus manos, que corrían por mi cadera atrayéndome hacía él, o la manera en que se acercaba, y los papeles crujían. No parecía consciente de mi súbito sonrojo, o cómo se entreabría mi boca para satisfacer la exigencia de oxígeno en mis pulmones por el bombeo alocado que comenzó a hacer mi corazón. Sólo parecía importarle que lo mirara.<br />
-Dime -exigió y respiré su mismo aire.<br />
Tragué en seco. ¿De qué estábamos hablando? Tomó los papeles de mis manos, y los colocó en algún lugar en el que no pude concentrar mi mirada, ya que estaba ocupada en sus ojos.<br />
Sus ojos no vacilaron una décima de segundo. Seguían trabados en mi.<br />
Sus manos subieron a la cintura, una mano en cada costado, y me apretaron.<br />
De repente estaba en el aire, soltando un gemido que no quise, pero todo el aire escapó de mi generando aquél sonido. Drew dio dos pasos conmigo en el aire, y me sentó en un mueble tras de mi. Había estado congelada hasta que él me levantó, entonces me agarré de él de puro susto. Mis manos quedaron en sus hombros.<br />
Sus ojos. Nunca dejó de mirarme. Parecía tener una buena geografía de la oficia, pero también de mi cuerpo.<br />
Drew nunca había tenido nada conmigo. Yo estaba anonadada en este momento. No podía ni generar una palabra en mi boca, o tampoco pensarla. <br />
Ok. Una mujer razonable sólo hubiera golpeado y puesto en su lugar al tipo por semejante atrevimiento. Pero era Drew, un tipo bueno con el que alguna vez había reído, o había querido borrar una tristeza suya con un abrazo. Sin embargo este trato suyo era semejante para con una mujerzuela, y debería sentirme ofendida, pero sólo quería dejarlo. Porque el cielo sabe cuantas veces he soñado con su boca y sus brazos alrededor mío.<br />
-¿Qué... Qué es esto? -Tartamudeé nerviosa. Lo alejé.<br />
-Te amo -Declaró con toda tranquilidad.<br />
Un calor subió a todo mi rostro, y continuo hasta las puntas del cabello.<br />
Tiene que ser una broma. Una muy cruel.<br />
-¿Disculpa?<br />
Sus manos bajaron de la cintura, pasaron por la cadera, y las deslizó por mis piernas hasta que cayeron a su lado. Su mirada se apartó.<br />
-La noche pasada te has emborrachado. -Afirmó muy seguro.<br />
-Y tu cómo sabes eso? -Exigí avergonzada. Era un estado deplorable. Ni siquiera recuerdo llegar a mi cama.<br />
-Lo sé porque lo vi.<br />
-Era una fiesta de mi amiga. Tú no estabas. <br />
Recuerdo haberme sentido bastante mal, recuerdo ver parejas, muchas, y recuerdo cuando decidí que necesitaba aflojarme con alcohol. Pero en ningún momento recuerdo haberlo cruzado en aquél lugar.<br />
Se alejó para apoyarse en el escritorio, y verme desde allí. Entonces me sentí incómoda de estar donde estaba.<br />
Si sus ojos pudieran ser menos atrayentes... Chocolate fundido invitándote a caer.<br />
-Porque no estaba en esa fiesta. Estaba afuera -explicó frunciendo el cejo-. Pasaba por ahí, cuando me llamó la atención el escándalo. Las puertas de lo que yo pensé que era un garaje se abrían, y comenzó a salir gente riendo y prendiendo cigarros. No di mucha importancia, hasta que me llamó la atención una voz. Miré y te encontré hablando bastante alto para estar tan cerca de un hombre de traje en la puerta.<br />
<br />
»...mi número -mientras metías la mano en el bolsillo del pantalón de aquél hombre, y demorabas-. Ups... -reíste tontamente por un rato incómodo- ¿Me acompañas a casa? No es lejos... -El hombre se acercó a tu oreja, y te dijo algo, y se fue adentro.<br />
Supuse que iba a buscar algo. Supuse que dijo que lo esperaras. Tú cruzaste la calle, y te quedaste mirando cómo salía la gente. Entonces no quise acercarme, no quería arruinar ningún plan tuyo, aunque igual lo hice. <br />
-¿Lisa? -Tardaste en reconocerme.<br />
-¿Drew? ¡Hola!<br />
-Yo pasaba... Y te vi, y quise saludarte, pero no quiero robarte tu tiempo -me excusé.<br />
-No. ¡No lo haces! ¡Drew! -gritaste mi nombre con alegría. <br />
-Yo... No quiero interrumpir nada...<br />
-¡La fiesta terminó, Drew! Todos van a casa a tener sexo. <br />
Voy a admitir que en ese punto me sentí incómodo, no es que quisiera saber que ibas a tener sexo con el tipo que conociste mientras pasaba. -¡Que simpático eres! ¿Me acompañas? Son... Yo no se... -miraste un lado a otro, y pensaste un rato- 2... ¡3! Son tres calles para allí, Drew. <br />
-Esperas a alguien -te recordé.<br />
-¿A quién? <br />
-Un tipo... De traje..<br />
-¿El gay? No... Él se fue... ¡Después de decirme que era gay! -reíste tontamente.<br />
-Lisa, no estás en tus cabales.<br />
-Drew... -Mencionaste mi nombre cansada- ¿Tienes idea lo que es estar dentro de esa caja todo el tiempo? No poder decir lo que quiero. No poder hacer lo que quiero. Siempre cortés, siempre educada, siempre correcta. Estoy hasta las narices de eso, Drew. Mira -Te acercaste y me besaste, de una forma poco recatada, yo sentí tu sabor a alcohol y a frutilla. Sentí tu respiración cálida, sentí tu pulso como el de un pajarito, sentí que eras suave, sentí ganas de atraparte.<br />
Tu boca entreabrió la mía, y pasaste la lengua suave pero con la pasión justa para desearte. Entonces yo también te besaba. Te atraje y te bese, pero yo no tenía ese talento tuyo de retenerme, es por eso que yo te comí con la boca, te mordí, competí con tu lengua, competí con tu deseo. Y me tuve que separar.<br />
-¿Era algo que querías hacer?<br />
-Desde mucho.<br />
Tome tu carita, y te bese nuevamente. Suave, probando tus labios, y el movimiento de ellos contra los míos. Mis manos acariciaron tu rostro delicadamente como si fueras una muñequita de porcelana, luego tu suave cabello hasta tu nuca, donde te atraje más a mi, llevando la delicadeza de la porcelana al límite. <br />
Ya no probaba tus labios, los saboreaba, y jugaba con los míos. Nuestras respiraciones eran masas de aire caliente contra el frío del exterior. <br />
Cuando mis manos llegaron a tu espalda baja, era un juego de lenguas, transportando calor a todo el cuerpo. Y tu lo endulzaste antes de separarte un milímetro y mirarme con ojos negros y brillantes. Tus pupilas se habían tragado el azul de tus hermosos ojos.<br />
-Algo que quería hacer desde hace mucho -confesé sin reparos-. ¿Vamos a hacer cosas que queramos desde ahora?<br />
Tú sonreíste, y asentiste con la cabeza antes de abrazarme.<br />
Caminamos las tres calles abrazados sin decir nada hasta la puerta de tu apartamento.<br />
-Drew, quiero... -te ruborizaste- como último acto de locura antes de que se me pase la borrachera, quiero... Que subas conmigo...<br />
-Quieres invitarme a tu apartamento?<br />
-Sí -presionaste mi costado.<br />
-No puedo hacer eso.<br />
-Sí puedes, solo que no quieres. Drew -Tal como me besaste en la salida de tu fiesta, así me besaste en la puerta del edificio. Pero fuiste más lejos. Abriste mi abrigo, manoseaste mi pecho, estomago, y empezaste a manosear el cinturón queriendo abrirlo. <br />
Entonces la situación me sobrepasó un segundo en el que acaricié tus piernas, fue cuando tuve que detenerme, y detenerte.<br />
-¿Qué pasó con lo de hacer lo que queramos?<br />
-No -alejé tus manos lejos de mi cinturón medio abierto, porque me estaba por volver loco-. Escúchame, tú no quieres esto... No estás pensando...<br />
-No, Drew, tú escúchame -me interrumpiste-. ¿No quiero esto? ¿Es broma? Estoy a esto... A esto de no pedir un intercambio para no torturarme más con tu rostro. Para dejar de soñar contigo, para poder concentrarme, para poder tratarte normalmente, para dejar de observarte cuando tu crees que no te miro... Ya no me importa... Te quiero. Quiero tenerte. Sueño con que tengo la fortuna de ser tuya, de poder mirarte directamente sin evitar tu mirada, con tocarte como quiera sin sentir nada más que alegría de poder hacerlo, sin sentir que está mal o equivocado...<br />
-Detente -pedí a punto de quebrarme.<br />
-Quiero... necesito ver... Lo que es... Tener libertad de hacer lo que me gustaría...<br />
-Estarías en mi cama sin ropa y enredada en mí... Si lo hicieses -aseguré atropellado y sin poder contener aquella confesión.<br />
-Importa si es mi cama y no la tuya?<br />
-No... No puedo... -a continuación huí.»<br />
<br />
No podía detener el ardor en el rostro, mejillas, ojos, cuello, y manos nerviosas. Todo aquello que me contaba tenia que ser de otra realidad, una paralela, una vida que no se podía mezclar con esta, y sin embargo Drew daba fe a que eso había pasado hace una noche. <br />
¿Drew dijo que me tendría en su cama?<br />
-Al llegar a casa, pensé demasiado al respecto. Pero cuando llegué al trabajo y no te encontré, pensé que todo se iba a derrumbar, que podrías no querer mirarme a la cara nunca más. Entonces cuando llegaste a la hora de partir, supe que querías evitarme. Me quedé adrede a hacer más horas, y me hablaste tan normal, que concebí la inseguridad de saber que quizás no te acordaras nada de nada.<br />
-Quizás quisiera no acordarme nada de nada -Asevere-. Lo siento tanto -Me disculpé después de bajarme del mueble y salir de la oficina.<br />
Alcancé a llegar al baño, entonces las lágrimas brotaron, mis manos y piernas temblaron sin parar y pensé que el colapso iba a continuar hasta desmayarme. Por desgracia no ocurrió.<br />
No sabría decir cuánto tiempo estuve allí odiándome, pensando en mudarme al polo norte y vivir en un iglú. <br />
Me daba miedo todo. Me aterraba que Drew supiera lo que yo pensaba, que supiera mis sentimientos. <br />
Me sentía herida. <br />
Me sentía tan estúpida.<br />
¿Porqué hizo lo que hizo? El Drew que yo conozco no era así. ¿Porqué se burlaba de mí? ¿Porqué jugaría así?<br />
Entiendo que anoche pudo haber hecho algo tal con una mujer que estaba sola y se le estaba regalando, sin embargo no entiendo porqué decidió tomar eso para burlarse de mi.<br />
Tenía que salir. No era una opción. Debía salir. Más aún, necesitaba escapar.<br />
Me levanté del suelo y abrí la puerta. No había nadie. Tampoco debería estar alguien esperando por mi...<br />
Entré a mi oficina, la cual estaba vacía, y me senté frente al escritorio como si nada hubiera pasado.<br />
Las estadísticas no cumplían ningún orden o sentido. O yo no lo tenía y no se lo podía dar a los papeles. <br />
Salí.<br />
Volví a casa. <br />
Sola.<br />
No vi a Drew.<br />
Subí a mi departamento por la escalera, busqué las llaves frente a mi puerta y encontré en mi bolso papeles.<br />
Papeles con mi nombre, de hecho servilletas, con mi nombre y un número de teléfono, era mi letra. Y ese número era mío si tuviera dos ceros en vez de tres.<br />
Esta mañana tomé el bolso arrebatada que usé anoche. ¿Realmente estaba entregando servilletas con mi número -con un cero de más- a cualquiera?<br />
-Me quiero morir -susurré.<br />
-Oh, no, por favor -escuché tras de mi.<br />
Drew.<br />
Se me cayó el bolso.<br />
-Disculpa.<br />
Algunas cosas se escaparon del bolso y rodaron por el suelo. Entre ellas un tubito. Se me heló la sangre. <br />
Drew lo alcanzó y lo observó mientras elevaba las cejas.<br />
Gel sabor durazno.<br />
¿En qué rayos estaba pensando?<br />
Me tendió el tubito en silencio.<br />
Lo guardé con rapidez, y esperé a que dijera algo. Pero no lo hizo.<br />
-Esto es... cada vez más bochornoso -admití entonces-. Yo lo siento por lo que pasó. Sé que las cosas ya no podrían ser como antes, y lo entiendo. No voy a tener más contacto contigo excepto por trabajo.<br />
Silencio.<br />
Saqué mis llaves para entrar. Quería escapar de su mirada.<br />
-Oye, espera-pidió dubitativo.<br />
-Tu no necesitas hacer esto -me adelanté-. Escucha. No sientas lastima. No pasa nada aquí. Sólo... No pretendas sentir cosas, si es por una especie de convenio... Porque yo no tengo autoridad de ascenderte de puesto...<br />
-¿Qué?-me cortó.<br />
-Eso. Yo no tengo...<br />
-Es ridículo. <br />
Sus facciones se molestaron. Se sonrojó, y estaba agitado. <br />
-Me he expuesto sólo por un momento de borrachera. Es mi error. <br />
-¿A qué te refieres? -Pregunté sorprendida, sin entender el significado de aquellas palabras. No en un sentido racional.<br />
-A que pensé que gustabas de mi tanto como yo de ti. Que anoche decias verdades, pero fue una borrachera -hizo una pausa, volviendo su cabeza a un lado-. Me he expuesto en tu oficina... Soy un idiota, sólo no pude contenerme. <br />
Él ¿Qué? <br />
¿Yo qué?<br />
Algún cristal dentro mío que no sabía que tenía se hizo añicos. El corazón me dio un vuelco tan brusco, dándome nauseas.<br />
No podía creer lo que estaba escuchando. <br />
-Tu... Te fuiste -le acusé catatónica.<br />
-¡Yo no quería tener sexo! Yo quiero hacer el amor contigo.<br />
Toda la sangre que mi corazón podía bombear se acumuló en mis mejillas. Podía sentirlo en todo mi rostro. Podía sentir que mi cuerpo había quedado vacío de aquél líquido y se agolpaba en mi rostro. Era todo un hormigueo por la médula espinal y electricidad por cada terminación nerviosa.<br />
Drew se acercó para tomar mi rostro con una mano y mirarme con ternura.<br />
-Tuve que escapar para no hacerlo. No quise herir tus sentimientos -rozó mi nariz con la suya-. Me mata cuando te ruborizas.<br />
Hubo un deja vu en ese acto. Ese aroma, el calor de su respiración en mi rostro, su mano tibia, y otro sentimiento más fuerte, un sabor, su sabor. El sabor de su boca.<br />
Lo bese y ahí estaba ese sabor. ¿Cómo pude despertar y olvidar todo aquello? <br />
Pero todas esas sensaciones estaban dentro de un estupor demasiado pesado. Y esto no se comparaba.<br />
Poder sentir eso que pensé que había soñado, era un insulto. Un insulto a lo que yo había pensado que sería. Era mil veces más fuerte a lo que pude imaginar.<br />
-Tienes libertad de hacer lo qu te guste conmigo -susurró entre beso y beso.<br />
Entonces entramos a mi departamento.Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-22745920706095192722012-09-15T15:18:00.000-07:002012-09-15T15:20:02.777-07:00Sabes que te amo<i>¿Sabes, Lucy? Yo pensaba que estarías conmigo para siempre.<br />
<br />
Pensaba que esto nunca ocurriría, y quizás por ello nunca te he dicho lo mucho que te amaba.<br />
<br />
Cada minuto que he pasado a tu lado fue una vida plena, y en cada momento junto a ti, he pensado en lo mucho que te amaba. <br />
<br />
Ahora que ya no estas, no recuerdo el por qué nunca te lo dije. Entonces ahora me suelo consolar con la idea de que en ese entonces no sabia que te irías tan pronto.<br />
<br />
Me llena el sentimiento de odio, y es que ¡Tendría que habértelo dicho! No importa si pronto partías o si recién llegabas, solo tenia que decírtelo, para que lo supieras.<br />
<br />
En estos días estuve pensando en cuanto te quiero, y ya no quiero pensar más en ello. El solo hecho de hacerlo me embarga de melancolía. Y no es que no te quiera querer mas, al contrario, quiero gritarlo a los cuatro vientos. Pero no es justo, porque si lo he sentido siempre, y no te lo he dicho, ¿Por qué ahora que ya no estas quiero gritarlo?<br />
<br />
¿Sabes, Lucy?... Te amo.<br />
<br />
Que estas palabras se las lleven tu recuerdo, pero al menos espero haberte hecho feliz.<br />
<br />
He escuchado todas y cada una de tus palabras, y he sabido lo que yo significaba para ti, una y mil veces. Y este tiempo me ha nublado la culpa por no haberte explicado lo que tu significabas para mi.<br />
<br />
No era mucho lo que había que decir... <br />
<br />
De hecho sólo una palabra.<br />
<br />
Todo.<br />
<br />
¿Sabes, Lucy? Tu significabas todo para mí.<br />
<br />
Ahora tengo la dicha de tener dulces recuerdos, y con eso me sobrellevo.<br />
<br />
Todas las mañanas me levantaba temprano para observar tu paz. Recuerdo haber cerrado mi boca muchas veces para escuchar tus palabras y también tus silencios. He memorizado el color de tus ojos en tus alegrías, y el brillo vidrioso en tus tristezas. La melodía de tu risa, que siempre desprendía belleza y tranquilidad.<br />
<br />
Todo ello me ayuda a esperarte, amor, cuando vuelvas.<br />
<br />
Mas ahora, la soledad no me hace buena compañía, y es que ninguna es buena compañía equiparándola con la luz de tu presencia. Todo es sumamente silencioso y monótono. <br />
<br />
Estoy solo esperando a tu regreso, ¿Cuanto mas falta, Lucy? Ya estoy viejo y escarchado, ¿A qué esperas para venir?<br />
<br />
¿Sabes, Lucy? Siempre acertabas mis males. Con suerte, hayas acertado en mi corazón.</i>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-53357761059022548572012-01-21T23:38:00.000-08:002012-01-21T23:38:22.110-08:00Capitulo 11<div style="text-align: justify;">Era un abrazo calido, quizás tenso para él teniendo en cuenta la diferencia de sentimientos. Pero si tuviera la posibilidad de no pensar, diría que es más agradable de lo que hubiera imaginado; y eso es decir mucho puesto que nunca me lo imaginé.</div><div style="text-align: justify;">Si volviera al pasado, lo sentiría como un refugio, en donde los problema no existen.</div><div style="text-align: justify;">Justamente ayer, en el árbol del colegio, en donde él me había confesado su amor, yo le había abrazado antes. Y era totalmente distinto a este abrazo porque... No lo sé exactamente. ¿El entorno era otro? ¿Había más intimidad en su habitación, a solas?</div><div style="text-align: justify;">Tenia la certeza de que ambos teníamos sentimiento diferentes, pero ¿Qué tan lejos están uno de otros? Es decir, yo lo quería muchísimo a él. Él había hecho mucho por mi, en cambio yo no había hecho nada por él. Entonces, ¿No seria más lógico que yo lo quisiera más?</div><div style="text-align: justify;">Liam suspiró profundamente, y entonces pensé que se iba a apartar de mí. Pero no lo hizo, de hecho hundió su rostro en mi cabello dejándome soportar parte de su peso.</div><div style="text-align: justify;">Me alegre, y decidí que quizás, sí que le quería más.</div><div style="text-align: justify;">Apoyé mi cabeza en su hombro, y el peso se igualo. </div><div style="text-align: justify;">No tenía que disculparse por nada. Él no me había obligado a nada, fui yo quien se desesperó con sus pensamientos. </div><div style="text-align: justify;">Sentí un calor en la nuca que me hizo encogerme de hombros muy levemente. Era su respiración la que provocaba aquel calor. Liam corrió el rostro, y luego se apartó, soltando los brazos que me sostenían por la cintura junto a él.</div><div style="text-align: justify;">Pero mis brazos se quedaron duros entorno a él. Así que les obligué soltarse de a uno.</div><div style="text-align: justify;">—Lo siento —Se disculpó con voz inexpresiva, algo automático. Entendí que fue meramente formal, y que a lo mejor ni tenía ganas de disculparse.</div><div style="text-align: justify;">—¿Por qué? —Pregunté mirándole fijo.</div><div style="text-align: justify;">—Por presionarte, y hacer que hagas cosas que no quieres.</div><div style="text-align: justify;">—Yo no hago nada que no quiera —Contradije frunciendo el ceño. Pero luego me di cuenta que eso no era cierto, y que todo el mundo hace cosas que no quiere—. Bueno... —Agregué luego de una pausa. —La mayoría de las veces. —Especifiqué, y el rió negando con la cabeza.</div><div style="text-align: justify;">Entrelacé ambas manos, y las mire, pellizcándome los dedos. Una acción totalmente hecha para evitar la incomodidad. Lo vi por el rabillo del ojo sonreír al observar mi jueguito con los dedos y comprender. </div><div style="text-align: justify;">Apunto de decir algo, se escuchó un ruidito a una distancia peligrosa de la puerta. Abrí los ojos como platos, y lo miré casi asustada buscando una solución. El me devolvió una mirada de alerta, y cerró los ojos con fuerza.</div><div style="text-align: justify;">Mis músculos se tensaron y barrí la habitación con la mirada, buscando un lugar donde meterme.</div><div style="text-align: justify;">Pensaba «No hemos hecho ruido. No lo hicimos. Sus padres tendrán una gran sensibilidad al ruido» </div><div style="text-align: justify;">Me estaba por meter debajo de la cama en medio de la habitación de forma infantil, cuando Liam me tomó del brazo y negó con la cabeza. Se dirigió a un rincón, y abrió el armario, corrió con brusquedad las perchas que sostenían su ropa a un lado, y me empujó con suavidad hacia allí. Era un lugar pequeño, así que me comprimí todo lo que pude para entrar y permanecer como una estatua.</div><div style="text-align: justify;">Liam dejó la puerta entreabierta, y pude observar muy poco por aquella ranura. Sin embargo, supe que alguien había abierto la puerta, por el ruido del picaporte.</div><div style="text-align: justify;">La pequeña ranura me permitía ver la pared. Asíque daba igual si la dejaba así, o la cerraba completamente.</div><div style="text-align: justify;">¿O es que era por el aire? ¿Acaso iba a tardar mucho tiempo?</div><div style="text-align: justify;">—¿Liam? ¿Sigues despierto? —Era su madre. </div><div style="text-align: justify;">Pensé con ironía: «Ni modo que este durmiendo parado... O sea sonámbulo»</div><div style="text-align: justify;">—Sí ,mamá —Sonaba una pizca nervioso—. No puedo dormir.</div><div style="text-align: justify;">—¿Te sientes bien? —Preguntó y sentí pasos, luego hubo luz. Más pasos.</div><div style="text-align: justify;">Seguro se acercaba a su hijo para verlo mejor.</div><div style="text-align: justify;">—Mamá —Murmuró en un tono quejumbroso—. No tengo nada. Solo... No tengo sueño.</div><div style="text-align: justify;">Se escuchaba el movimiento de ambos cuerpos, y me pregunté qué le estaría haciendo.</div><div style="text-align: justify;">—No digas tonteras, te escuche revolotear por aquí —Le reprochó —. Venga, te preparé algo.</div><div style="text-align: justify;">¿Revolotear? Juraría que no hemos hecho ruido. Quizás estaba muy enfrascada como para notarlo.</div><div style="text-align: justify;">Hubo un pequeño silencio, un momento de duda. Y luego su madre -que tenia una cadencia de pasos mas lentos y arrastrados- caminó hacia la puerta. Liam, por su parte, la siguió después de un segundo.</div><div style="text-align: justify;">Había algo que me molestaba, quizás su madre me pareció un poco cargosa. Y lo mas probable fuera que me dieron celos. </div><div style="text-align: justify;">Me dieron celos de la preocupación de su madre por su hijo, de que se preocupara por que no pudiera dormir, de que se levantara de su cama para verificar que su hijo estaba bien, y de que algo tan vulgar como no poder dormir la hiciera ir a preparar algo para él.</div><div style="text-align: justify;">Creo que he pasado miles de noche en vela, y mi mamá nunca se ha preocupado por ello. No es que la culpara de nada, porque ella vivía muy cansada por culpa del trabajo, pero... Me hubiera sentado reconfortante que un día me preguntara si había dormido bien esa noche. </div><div style="text-align: justify;">Las piernas se estaban adormilando en esa posición, y odiaba la sensación del cosquilleo. Pero la luz seguía encendida, y aunque no escuché más nada después de oírlos caminar hacia la otra punta de la casa, me atemorizaba la idea de hacer algún ruido, o incluso salir para estirar las piernas y volver.</div><div style="text-align: justify;">Pero ya no podía sentir los pies, o mover mis dedos del pie. Asíque agudicé el oído para escuchar algo. </div><div style="text-align: justify;">Decidí que no había nadie, ya que ni siquiera un respiro se escuchaba. Sin embargo, abrí la puerta lentamente imitando como si se abriera sola, por las dudas de algún observador deje un segundo... y nada.</div><div style="text-align: justify;">Levanté un pie para apoyarlo torpemente en el suelo, aunque sin hacer ningún sonido. Luego el otro, y me impulse con los brazos para levantarme y golpearme la cabeza con la parte superior del armario. Me llevé las manos a la frente cerrando con fuerza los ojos, no pudiéndome creer lo torpe que era. </div><div style="text-align: justify;">Perdido el equilibrio, trastabillé al querer caminar por culpa de los estúpidos pies dormidos, y me termine cayendo en el respaldo del pequeño sillón que había frente mío. Quedé doblada sobre el respaldo, la cabeza la tenía apoyada en el acolchado almohadón del sillón, mirando el mundo patas para arriba, aunque eso era mentira, porque tenía los ojos cerrados con fuerza, y las manos tapándome la cabeza. Pero lo supe por la presión que comenzaba a sentir, y la sangre acumulándose allí.</div><div style="text-align: justify;">Me erguí despacito hasta quedar de pie, entera. La frente me latía del porrazo que me mandé.</div><div style="text-align: justify;">Me quedé quieta, intentando concentrarme en lo que tenía frente a mí.</div><div style="text-align: justify;">Ahora: ¿Hice mucho ruido? ¿Me habrán escuchado? Si así fuera, no podía quedarme aquí hasta escuchar que alguien venía y me viera. </div><div style="text-align: justify;">Me arrastré como pude al baño, cerrando la puerta, quedando al pleno oscuro. Me senté en el suelo contra la puerta, esperando algún sonido que me indicara que me habían descubierto.</div><div style="text-align: justify;">Los pies empezaron a cosquillearme. ¡Una sensación tan fea! Me mordí la lengua y cerré los ojos con fuerza, para no moverme o hacer nada.</div><div style="text-align: justify;">Al cabo de un momento, la sensación comenzaba a menguar, y detrás de la puerta en donde me apoyaba, no se escuchaba nada. Saqué mi celular, para usarlo como luz, puesto que si prendía la luz, sabrían que estoy aquí; si es que alguien estaba allá afuera.</div><div style="text-align: justify;">Dejé mi celular en mi regazo, iluminándome la cara. Me empecé a masajear las deportivas que llevaba, para confirmar que mis pies eran utilizables otra vez.</div><div style="text-align: justify;">Me levante del suelo, iluminando a mi alrededor (para no golpearme con nada, esta vez.) La cabeza me empezó a latir, justamente ahí, en el golpe. Me llevé una mano a la frente, y palmee imitando el roce de una pluma. Sentí todo magullado, pero luego comprendí que quizás eran mis arrugas de la frente, por la preocupación.</div><div style="text-align: justify;">Relajé los músculos del rostro, y antes de volver a palmearme, vi el espejo frente al lavabo.</div><div style="text-align: justify;">—Tonta —Me susurré a mi misma. </div><div style="text-align: justify;">Me acerqué y me iluminé la cara. Relajé la frente, y si, estaba magullada. Me había levantado un poco la piel, y estaba de un color morado, pero no era nada. No sangraba, o parecía muy feo. Solo un poco de piel transparente, nada más. Una línea extraña, que me cruzaba la frente.</div><div style="text-align: justify;">Mojé papel, y me lo sostuve en la frente. Así se sentía fresco.</div><div style="text-align: justify;">Volví a sentarme en el piso, aburrida. La soledad lograba que volviera a pensar en mis asuntos.</div><div style="text-align: justify;">Malcom.</div><div style="text-align: justify;">¿Qué haría sin él? </div><div style="text-align: justify;">Gruñí de la frustación.</div><div style="text-align: justify;">A ver... Tengo problemas con los cambios. ¿Cual es el cambio? Voy a ser la única en esa casa. ¿Qué mas? Hummm... Ya no va a estar ahí cuando necesite un poco de cordura, ya no va a estar ahí cuando necesite observarlo, haciendo sus cosas, estando en la computadora, verlo pasear de un lado a otro buscando algo. Pero más aún, no va estar para no sentirme sola. Para enojarme quizás, cuando cambie de lugar algún objeto. Todo va a estar igual que siempre.</div><div style="text-align: justify;">Si, quizás es porque es el único con una vida propia. Mamá en el trabajo, papá en el alcohol, y yo... No se. Volando por ahí.</div><div style="text-align: justify;">Bueno, ya no más. No encontraba sentido a lo que estaba haciendo. ¿Se supone que siga así por el resto de mi vida? ¿Por un imbécil que me plantó falsas ilusiones?</div><div style="text-align: justify;">Pero no es solo eso. Es mi realidad, a la que no quiero volver.</div><div style="text-align: justify;">La de llegar a una casa que no me gusta, de ver el rostro de mi madre cansado, ver el de mi padre, perdido, con la vista nublada, y malhumorado… y... Oh... Yo me parezco a él.</div><div style="text-align: justify;">Supongo que mi evasión no alcanzará para siempre, y necesite algo más para lograr olvidarme de las penurias. ¿Así es? ¿Mi papá se evade del mundo? ¿Porque esta mugrosa vida no le alcanza?</div><div style="text-align: justify;">No quiero ser como él. La idea me desagrada tanto, que me doy asco a mi misma.</div><div style="text-align: justify;">Descubrir esto debería ser como una gran vislumbramiento al camino de lo correcto, pero no dejo de pensar en que no quiero ser como él. No quiero arruinar mi vida, y la de los demás.</div><div style="text-align: justify;">Se me forma un nudo en la garganta, por solo pensarlo.</div><div style="text-align: justify;">Apoyé la cabeza entre las piernas, y poder tranquilizarme.</div><div style="text-align: justify;">Me entró una urgencia horrible por buscarle un sentido bueno a la vida. Lo necesito. Algo, en todo este mundo, tiene que valer la pena.</div><div style="text-align: justify;">Helen, mi dulce amiga. Ella es buena.</div><div style="text-align: justify;">¿Malcom? Si, por supuesto que si. Y mamá también.</div><div style="text-align: justify;">Liam.</div><div style="text-align: justify;">El lugar en donde me encontraba.</div><div style="text-align: justify;">Liam siempre está ahí. Él me quiere. Me quiere bien.</div><div style="text-align: justify;">Un concepto general de buena vida sería: Dinero, amor, familia, salud y amigos.</div><div style="text-align: justify;">Dinero: no tengo. </div><div style="text-align: justify;">¿Amor? Indefinido.</div><div style="text-align: justify;">Familia: Supongo que sí. Incluso mi padre me sirve de ejemplo de lo que no quiero ser.</div><div style="text-align: justify;">Salud: Por lo que yo se, va todo bien.</div><div style="text-align: justify;">Amigos: Si. Valen oro, y no los cambiaria por nada.</div><div style="text-align: justify;">"Nunca se está tan al fondo" "Se llama lógica, debes desarrollarla un poco mas" A lo mejor si. </div><div style="text-align: justify;">Por lo menos la mayoría de las cosas las tengo, ¿No?</div><div style="text-align: justify;">Desvalorice todo lo que tengo, centrando mi vida en un problema. Ese problema no es Ryan, deliberadamente. Ese problema es mi padre, y yo. Son mis decisiones el problema, porque Malcom no parece aborrecido de nada.</div><div style="text-align: justify;">Malcom se va a ir de casa, sin ningún drama, en tanto que yo... Elegí otra cosa.</div><div style="text-align: justify;">Bueno, cambiaré de juego. Tendré que seguirle la corriente a esa minima parte de mi que, a mi parecer, dice cosas absurdas. Intentaré prestar más atención, para ver cuál es mi reacción habitual, y cambiarla en algo nuevo.</div><div style="text-align: justify;">«Toc» se sintió detrás mí. Imaginé que sería la puerta al cerrarse.</div><div style="text-align: justify;">Gateé hacia adelante, tanteando con las manos lo que había delante de mí, hasta que di con la ducha. Me metí ahí, cerrando la cortina.</div><div style="text-align: justify;">Alguien vino hasta la puerta del baño, la abrió súbitamente, y encendió la luz.</div><div style="text-align: justify;">Me mordí el labio inferior con fuerza, mirando para arriba. Imagine que a lo mejor, podría proyectar alguna sombra. Alguien suspiró, y apagó la luz. ¿Liam?</div><div style="text-align: justify;">Me asome al momento justo en que cerraba la puerta, sin siquiera mirar. </div><div style="text-align: justify;">Me levanté, y salí de la ducha, para dirigirme a la puerta. La entreabrí, y me asome con cautela.</div><div style="text-align: justify;">Lo encontré al lado del ropero donde había estado, agachado, recogiendo los objetos que vi al entrar. Eran adornos -una especie de cajita, y un soldadito con muchos brazos, y armas de todo tipo. Se había desarmado, por eso no le veía forma la primera vez que lo observé.- </div><div style="text-align: justify;">Entré a la habitación con sigilo.</div><div style="text-align: justify;">—¿No hay moros en la costa? —Susurré bien bajito, pero lo sobresalte. Me miró sorprendido, y luego sonrió.</div><div style="text-align: justify;">—No —Dijo al mismo tono—. Lo siento... Oye... —frunció el seño— ¿Qué tienes ahí? —Preguntó acercándose señalándome con un dedo.</div><div style="text-align: justify;">—Hummm... —Miré instintivamente hacia arriba, aunque no pudiera ver el golpe— Si, soy muy torpe. —Admití.</div><div style="text-align: justify;">—¿Qué pasó? —Se acercó para ver, pero luego se detuvo, sin invadir mi aire.</div><div style="text-align: justify;">—Es extraño, pensé que había hecho ruido, y te metería en problemas... Bien, intente salir del armario, pero calcule mal las medidas, al parecer. </div><div style="text-align: justify;">—¿Cómo? En serio, no entiendo como pudiste hacerte eso —Me hizo una mueca. </div><div style="text-align: justify;">—Me levante muy rápido —Resumí —. Ah... Lo siento, ¿Soy mucha molestia? Tu madre... Ella es muy buena, no quiero meterte en ningún aprieto...</div><div style="text-align: justify;">—No pasa nada —Comentó sonriendo —. Ya se va dormir —Hizo una pausa —. No es tu... Es que hice mucho ruido cuando bajé, ya te lo dije, pero pensé que no me habían escuchado. De todos modos, si me permites bromear, pensé que me preguntarías al respecto sobre cómo salté las escaleras, y yo te contaría alardeando, y tu te impresionarías.</div><div style="text-align: justify;">No pensé que estaba de humor para bromear, y mucho menos sobre impresionarme, burlándose de sí mismo.</div><div style="text-align: justify;">—Hummm... ¿Hiciste una buena acrobacia ahí abajo?</div><div style="text-align: justify;">—¿No viste el desorden? Mi madre si lo hizo.</div><div style="text-align: justify;">No recuerdo haber visto ningún desorden, gracias que veía bultos en la oscuridad para no tropezar cuando subíamos a su habitación.</div><div style="text-align: justify;">—No importa —Le restó importancia con un movimiento de muñeca. Parecía... Un poco frenético. Es decir, hace un rato me decía con melancolía que me amaba, y ahora bromeaba. Se suponía que su madre le iba a dar algo para dormir, no para darle más energía.</div><div style="text-align: justify;">—Ah... ¿Tu mamá todavía esta abajo?</div><div style="text-align: justify;">—Cierto... —Comentó pensativo— Eh... Yo no sé... Tu... Ah... —Miró el piso— ¿Quieres quedarte? —Balbuceó.</div><div style="text-align: justify;">Sentí un cosquilleo en la nuca. </div><div style="text-align: justify;">—¿Es ese un ofrecimiento o me preguntas qué pretendo?</div><div style="text-align: justify;">—No... Eh... No se. Tu... ¿Te gustaría quedarte? —Esta vez me miraba a pequeños intervalos. Y ahora la presión recaía sobre mí, y me puse tan nerviosa como él.</div><div style="text-align: justify;">No se trataba de si yo "quería". ¿Quería?¿A qué vine sino? Es sólo que... Después de todo lo que dijo, y todo eso... Era una situación incómoda.</div><div style="text-align: justify;">—Te acompaño a casa, entonces —Agregó ante mi silencio.</div><div style="text-align: justify;">—No es necesario —Me apresuré a responder—. No quiero que tengas problemas... Yo... Es tarde, y tus padres...</div><div style="text-align: justify;">—Está bien, Em —Me cortó con su extraña tranquilidad.</div><div style="text-align: justify;">Me callé sintiéndome de nuevo mierda de otro tacho.</div><div style="text-align: justify;">No quería volver a casa. Pensé de forma caprichosa.</div><div style="text-align: justify;">¿Qué pasó con eso de cambiar mi reacción? Sigo rechazando al pobre de Liam...Él se había vuelto a calzarse unas nuevas zapatillas, y recogió una campera.</div><div style="text-align: justify;">—Quédate aquí un segundo —Me advirtió, volviéndose a la puerta.</div><div style="text-align: justify;">Desapareció tras la puerta. Pude quejarme. Preguntar cómo saldríamos de aquí. Qué pasaría con sus padres si despertaban y él no estaba. Pero no dije nada. Estaba triste.</div><div style="text-align: justify;">La puerta volvió a abrirse. "ese segundo sí que fue rápido."</div><div style="text-align: justify;">—Tienes suerte. Mamá recién empieza a tomar su té —Fruncí el seño sin entender. </div><div style="text-align: justify;">¿Acaso eso es bueno? ¿No se iba a dormir? La cocina estaba justo al lado de la puerta trasera por la que entramos. ¿Cómo puede ser bueno que ella empiece a tomar té? La puerta de entrada estaba en una vista espectacular desde la cocina.</div><div style="text-align: justify;">—No entiendo —Admití—. ¿Eso de "tener suerte" es una ironía? </div><div style="text-align: justify;">—No —Sonrió—. Ella tomará su té y luego irá a dormir como un bebé.</div><div style="text-align: justify;">—Y ahí es cuando salimos —Intuí.</div><div style="text-align: justify;">—No —Repitió. Empiezo a creer que el golpe en la cabeza me afectó—. Salimos ahora. ¿Tienes idea cuánto tiempo demora en tomar el té? Creo que se pone a pensar en la raíz de un numero negativo.</div><div style="text-align: justify;">—Ah...</div><div style="text-align: justify;">—¿Quieres esperar a que termine? Podría ser 15 minutos, tanto como 2 horas —Me desafió.</div><div style="text-align: justify;">—¿Como piensas salir? —Inquirí.</div><div style="text-align: justify;">—Oh, ya. Bajamos las escaleras, entramos a la sala de estar con mucho silencio, y ahí hay una gran ventana.</div><div style="text-align: justify;">¿Cuántas veces Liam habrá hecho estas cosas? O las ha pensado.</div><div style="text-align: justify;">Asentí sin protestar.</div><div style="text-align: justify;">Lo seguí en silencio hasta las escaleras. Liam se pegó a la pared, y comenzó a bajar lentamente. Le imité con mucho cuidado, respirando suavemente.</div><div style="text-align: justify;">Noté que se había puesto la campera, seguramente en ese segundo que salió. Era negra, y la tenía prendida hasta el cuello. Seguramente era para camuflar, sobre todo porque su camiseta gris se notaría en medio de la oscuridad, bueno, fue gris en un momento, ahora parecía una camiseta blanca sucia.</div><div style="text-align: justify;">Liam se detuvo, y así lo hice yo. Desde el otro lado de la escalera provenía una luz amarilla. «Es imposible» pensé. </div><div style="text-align: justify;">Nunca podríamos llegar al pie de la escalera, y doblar a la izquierda. Su madre notaría el movimiento, y nos vería.</div><div style="text-align: justify;">Liam sintió mi duda, y me agarró la mano, que estaba muy cerca suyo. La pegó a su costado con determinación. Bajó otro escalón, y esperó. Tironeó de mi para que bajara con él.</div><div style="text-align: justify;">Luego asintió, y bajo de un salto las escaleras, arrastrándome con él.</div><div style="text-align: justify;">Era más difícil bajar teniéndome de la mano, porque así tenía que estar pegada a él y no me dejaba mucho espacio para pisar tras él, sin tropezarme con sus pies. </div><div style="text-align: justify;">De alguna forma, llegamos a la sala de estar. Liam se dirigió a una esquina, en donde había unas cortinas color verde oscuro. Se metió en ellas, dejándome fuera, formando un bulto.</div><div style="text-align: justify;">Ví como se movía, se agachaba, y hacía temblar levemente las cortinas. Sentí como la ventana se deslizaba, y me metí dentro de la cortina sin esperar una invitación.</div><div style="text-align: justify;">Liam me tendió una mano para ayudarme, y salté al patio delantero, con Liam pisándome los talones.</div><div style="text-align: justify;">Yo caminé a la calle, pero él se quedó cerrando la ventana, sin trabarla.</div><div style="text-align: justify;">Cuando él se unió a mí, empezamos a caminar.</div><div style="text-align: justify;">—Creo que es divertido esconderse de tus padres —Admití con cierta satisfacción. </div><div style="text-align: justify;">Hacia un tiempo que no sentía la necesidad de preocuparme qué estaba haciendo. Y en su casa no paraba de hacerlo, pensando en que su madre me escucharía o descubriría. Además, era algo así como... Excitante, en una forma de sentir un poco de adrenalina por el riesgo.</div><div style="text-align: justify;">No era gran cosa, pero ahora es divertido.</div><div style="text-align: justify;">—¿Si? —Preguntó— ¡Que bueno!</div><div style="text-align: justify;">—Y... ¿Qué pasará si se dan cuenta que no estás allí?</div><div style="text-align: justify;">—Eso no va a pasar.</div><div style="text-align: justify;">—No quiero irme a casa —Le solté.</div><div style="text-align: justify;">Liam se detuvo en seco, entrecerrando los ojos.</div><div style="text-align: justify;">—¿Dónde quieres ir entonces? —Preguntó sin cambiar la expresión.</div><div style="text-align: justify;">Había un lugar al que quería ir, pero no podía estando sola. Y ya no estoy sola.</div><div style="text-align: justify;">—Vamos al parque. </div><div style="text-align: justify;">—¿Al parque? —Preguntó elevando las cejas.</div><div style="text-align: justify;">Sus ojos ya no parecía azules. Estaban muy oscuros. La luz debe producir aquellos colores.</div><div style="text-align: justify;">—Si —Dije sin pensar. "Empiezo desde ahora" me dije a mi misma. Voy a hacer lo primero que se me ocurra en la mente—. Vamos a pasear —Propuse.</div><div style="text-align: justify;">—Ok —Aceptó con una sonrisa extraña.</div><div style="text-align: justify;">Volvimos en redondo y cambiamos de dirección. Una brisa nos pegaba de frente, pero como antes, no lo suficientemente fría para hacerme temblar.</div><div style="text-align: justify;">—Hay un lindo lugar ahí —Comenté—. Estuve una vez, y me pregunté que tal sería de noche. Supuse que sería muy lindo. </div><div style="text-align: justify;">Quizás pueda decir cosas estúpidas como tal. ¿A quién le importa?</div><div style="text-align: justify;">—Bueno... Averiguaremos.</div><div style="text-align: justify;">Quiero ser alguien normal. ¿Hacer esto no es normal? Lo voy a intentar con todas mis fuerzas. Intentaré vaciarme por completo para ser alguien que quiera ser. Alguien que tiene problemas y los supera, que le cuenta a sus amigos lo que le pasa, que hace cosas estúpidas y se ríe de eso, que se despierta a la mañana empezando un nuevo día y no cargando con el anterior.</div><div style="text-align: justify;">Si, lo declaro ahora mismo, me vacío completamente. Soy alguien más.</div><div style="text-align: justify;">—¿Podrías ayudarme a subir mis calificaciones? —Pregunté recordando eso— Es... El último año, y... No quiero arruinarlo.</div><div style="text-align: justify;">—Vaya, vaya, vaya ¿Qué tenemos aquí? —Preguntó sonriendo picaronamente— Alguien le pide ayuda al "nerd" de 8.5</div><div style="text-align: justify;">—"Nerd 8.5" —Repetí.</div><div style="text-align: justify;">—Ya te dije... Cuando quieras —Dijo riendo. </div><div style="text-align: justify;">Parecía feliz.¿Estaba feliz por mi, o estaba feliz que le eligiera primero como me había dicho en su casa?</div><div style="text-align: justify;">—Uh... Cuando puedas, podrías... </div><div style="text-align: justify;">—Siempre puedo —Me cortó.</div><div style="text-align: justify;">—Ok —Levanté las palmas. El rió.</div><div style="text-align: justify;">El camino no fue tan tormentoso yendo los dos. Encontramos gente mientras caminábamos, y no me parecieron tan amenazadoras como cuando iba sola.</div><div style="text-align: justify;">Liam no era un físico culturista, robusto, o tenía pinta de bravucón y tampoco era alto, sin embargo me transmitía seguridad. Porque el siempre me protegía.</div><div style="text-align: justify;">—Yo... Estaba desesperada en busca de una esperanza. Es que pasaba mucho tiempo en casa, y mi papá era insoportable. Entonces apareció Ryan como una esperanza. Él dijo que me sacaría de mi casa, y yo puse toda mi fe o esperanza, como quieras llamarlo, en él —Hice una pausa—. Cuando me dejó... Se llevó toda mi esperanza. Toda la había depositado en él, y se la llevó.</div><div style="text-align: justify;">Le tomó un momento procesar la información.</div><div style="text-align: justify;">—Si hubiera...</div><div style="text-align: justify;">—Ya no importa —Le corté—. La parte normal es que... Le guardo rencor porque no me dijo el por qué terminamos. Ya sabes, cosas de chicas.</div><div style="text-align: justify;">Me miró con una mueca en el rostro. Una mueca de duda. Pero desapareció por rabia.</div><div style="text-align: justify;">—Yo era su amigo, pero lo odio por irse, Emily. Odio que te haya dejado por nada. Odio que te haya hecho sufrir de ese modo. Y odio más que te haya dicho que ahora quiere volver contigo.</div><div style="text-align: justify;">—Hummm... No sabía eso —Lo cierto era que quería descargarme con Liam, decirle lo mucho que había sufrido, el mar de dudas que Ryan me había dejado, y quería escuchar que Liam también se había decepcionado de él, quería escuchar que también le había hecho daño, de un modo muy egoísta, de sentirme acompañada. Pero eso era lo que antes me hubiera gustado, y se supone que ahora no quiero eso—. De todos modos, ya pasó. Y yo nunca volvería con él. Me gustaría decir con satisfacción que ya no me importa.</div><div style="text-align: justify;">—Si, pero... —Tenía dos opciones: Seguir hablando de ello, o cortarlo y seguir con el vacío.</div><div style="text-align: justify;">—Ah —Interrumpí groseramente—, Ya casi llegamos.</div><div style="text-align: justify;">Por lo menos queda en claro mi posición. Preferí el vacío, ¿No?</div><div style="text-align: justify;">«Ya está, hablé de ello. Eso es todo» Pensé irritada. </div><div style="text-align: justify;">Era lo que la gente quería, decían que yo me encerré en mi misma, y que hablar de ello hubiera sido lo mejor. Bueno, ya lo hice.</div><div style="text-align: justify;">Percibí la mirada sorprendida de Liam, pero seguí mirando al frente, sin prestarle atención.</div><div style="text-align: justify;">Caminamos en silencio hasta llegar al parque, que estaba vacío. Es decir, de personas.</div><div style="text-align: justify;">—La verdad, no vengo aquí casi nunca. —Admitió cuando llegamos, siguiendo una senda para los corredores, iluminada por grandes y altas farolas. No parecía muy interesado al respecto.</div><div style="text-align: justify;">—Si, de hecho, eso mismo pensé cuando vine aquí —Comenté, y Liam se volvió a mirarme—. Es decir... Que la gente no viene aquí. Prefieren hacer otras cosas —Aclaré.</div><div style="text-align: justify;">El parque ocupaba toda la manzana, había unos juegos de niños en una parte, como casitas con escaleras de plástico, esa parte en particular estaba más iluminada que el resto. Pero nosotros nos dirigíamos al lado opuesto. Al grupo de sauces viejos que se alzaban allá, oscuros.</div><div style="text-align: justify;">Había una pequeña iluminación, pero no supe si era proveniente de la luna, o había una farola ahí dentro. Me dirigí hacia allí, llamando la atención de Liam.</div><div style="text-align: justify;">—¿Este es un lugar "muy lindo" que querías ver de noche? —Preguntó acercándose.</div><div style="text-align: justify;">Las ramas tristes y caídas de los árboles no tocaban el suelo, y para mí era bonito. Estaban de un color verde muy claro, por el cambio de estación.</div><div style="text-align: justify;">—¿Tienes miedo? —Le reté.</div><div style="text-align: justify;">Liam entornó los ojos, y me clavo la mirada.</div><div style="text-align: justify;">—Lo suponía —Comenté por lo bajo, con aire de superioridad. </div><div style="text-align: justify;">Me dirigí a los árboles a paso ligero, dejándolo atrás. No con maldad, sino porque sabía que iba a seguirme.</div><div style="text-align: justify;">De algún modo me recordó a Ryan. Él hacia este tipo de cosas. No iba a pedirte algo, sino manipularte de modo persuasivo para conseguirlo. Y yo me sentí como Ryan, sabiendo que Liam iba a venir atrás mío. Y así lo hizo. Al cabo de un segundo, me rozaba el brazo con el suyo.</div><div style="text-align: justify;">—Yo no tengo miedo —Contestó con determinación. Lo observé y pude ver una pequeña llama bailándole en sus ojos.</div><div style="text-align: justify;">Ralentice el paso cuando nos acercamos. Tenía las finas ramas al alcance de mi mano, y me imaginé una gran cortina de cuentas al estilo hippie. Pasé esquivando algunas que estaban más dispersas, y luego me llevé por delante algunas.</div><div style="text-align: justify;">—Ok. Juguemos algo —Propuse, volviéndome a él, que estaba a unos pasos por detrás observándome—. Vamos a caminar sin tocar ninguno —Expliqué acariciando una rama, arrancando unas frágiles hojas.</div><div style="text-align: justify;">—¿En serio? —Enarcó una ceja.</div><div style="text-align: justify;">Me encogí de hombros, sintiéndome patética. Entonces Liam dio un paso al frente, se volteó, caminó de costado, y doblaba las rodillas para agacharse un poco, hasta llegar hasta mí.</div><div style="text-align: justify;">Estábamos frente a frente con dos ramas, impidiéndole acercarse más.</div><div style="text-align: justify;">—¿Así? —Preguntó sonriendo.</div><div style="text-align: justify;">Yo estaba sonriendo, sin darme cuenta, supongo que me causó gracia en la forma que se movía. Asentí sonriendo más.</div><div style="text-align: justify;">—No hagas trampa —Me advirtió, dando un paso al costado.</div><div style="text-align: justify;">—Caminemos uno al lado del otro para controlarnos.</div><div style="text-align: justify;">Esperé que diera el paso adelante para tenerlo a mi lado, y cuando lo hizo, tocó una rama con el hombro izquierdo. Liam frunció los labios.</div><div style="text-align: justify;">—Perdiste —Anuncié.</div><div style="text-align: justify;">—Esa no valía. No empezamos todavía.</div><div style="text-align: justify;">—Oh, si —Puse los ojos en blanco—. Ahora ya empezamos. ¿Ok?</div><div style="text-align: justify;">Me deslicé por entre dos ramas, y luego me moví de costado, por que de frente era imposible pasar. Eché un vistazo atrás y vi como Liam desviaba la mirada a una rama con fingida distracción. Pude ver como la rama a su otro costado se mecía disimuladamente.</div><div style="text-align: justify;">—Volviste a perder, tramposo.</div><div style="text-align: justify;">Liam me observó divertido, y se agachó, tocando con las manos el suelo, se arrastro hasta mí, y se irguió. Tomó aire profundamente, y sopló con fuerza una rama junto a mi brazo, para que me tocara.</div><div style="text-align: justify;">—Perdimos —Informó con satisfacción—. ¿Cuantas vidas tenemos?</div><div style="text-align: justify;">—Dos —Puse una mano en su pecho, y lo empujé suavemente, haciéndolo retroceder. Se llevó varias ramas por delante—, y perdiste, de nuevo.</div><div style="text-align: justify;">Me di media vuelta y empecé a maniobrar para no tocar ninguna rama. Echaba un ojo atrás para ver a Liam seguirme, balanceándose como yo. Las ramas se volvía más espesas mientras avanzábamos, y nos volvíamos más lentos. </div><div style="text-align: justify;">—¡Gané! —Le grite, para provocarlo.</div><div style="text-align: justify;">Parecíamos unos niños.</div><div style="text-align: justify;">Di media vuelta, y me lo encontré a dos pasos, en una pose ridícula que me hizo reír.</div><div style="text-align: justify;">—Ok —Se rindió, enderezándose tocando todas las ramas que le rodeaban, y levanto las manos al cielo—. Te dejo ganar.</div><div style="text-align: justify;">Estábamos más cerca de la luz, asíque se le podía ver la expresión a la perfección. Era una especie de alegría con miedo. Era muy extraña.</div><div style="text-align: justify;">—Bueno, ya, hice trampa, toqué muchas ramas con el cabello, no te diste cuenta.</div><div style="text-align: justify;">—Si lo hice —Admitió, sonriendo con cierta timidez—. Solo que no te dije nada.</div><div style="text-align: justify;">—Que tonto —Comenté desviando la mirada, avergonzada.</div><div style="text-align: justify;">El típico dejar ganar. «¡Que romántico!» pensé con ironía.</div><div style="text-align: justify;">Me sacudí esa sensación mentalmente, y caminé por entre las ramas, a donde se suponía que estaban esos bancos para sentarse.</div><div style="text-align: justify;">Era de esperar que estuvieran cercana a la luz. Allí estaban, a unos metros de la senda de corredores. Eran bancos dobles, pegados respaldo contra respaldo. Hecha con tablas de madera, pintadas en verde.</div><div style="text-align: justify;">Me cuesta mucho todo esto, pero tengo que hacerlo hasta acostumbrarme, y... Que siga así.</div><div style="text-align: justify;">No es que sienta mal estar con Liam, pero el impulso es rechazarlo, y él con alguna frase como aquella, siempre me recuerda en algún momento toda la situación en la que estamos metidos, y hace que el impulso me gane antes que pensarlo. Hace un rato ni había pensado en que estábamos bien, y en que le estaba permitiendo más de la cuenta, hasta que dijo aquello.</div><div style="text-align: justify;">Por que no es normal, y él lo sabe. </div><div style="text-align: justify;">Como si tuviera que justificar el hecho del por qué estábamos así.</div><div style="text-align: justify;">—¿Vamos a sentarnos un rato? —Pregunté señalando a los bancos, mirando a un costado, sabiendo que no estaría ahí, sino más atrás.</div><div style="text-align: justify;">—Ah, si.</div><div style="text-align: justify;">Caminé demasiado lento hasta allá, y aún así, Liam siguió atrás mío. Me senté en la esquina más cercana, en la banca que miraba a la senda. Me quedé mirando como Liam caminaba lentamente, hasta sentarse al lado mío, en el otro banco.</div><div style="text-align: justify;">Supongo que pensó que me había molestado su comentario. Pero no entiende que no es eso, si no que me abruma la noticia. ¿Hace cuánto me dijo que gustaba de mi? Recién ayer.</div><div style="text-align: justify;">Ok. Entiendo que su amor no empezó ayer, y que yo estuve tan ciega, pero recién estoy intentando cambiar de actitud.</div><div style="text-align: justify;">Le miré de reojo, y vi como mantenía la distancia. Se me ocurrió la idea de abrazarlo. De hacer lo que él esperaba.</div><div style="text-align: justify;">Suspiré.</div><div style="text-align: justify;">—¿Estas cansada? —Preguntó, repentinamente interesado.</div><div style="text-align: justify;">Una especie de ira me recorría el cuerpo. «¿Qué diablos me impide hacer las cosas?» me pregunté a mi misma.</div><div style="text-align: justify;">Lo miré con atención, frunciendo el cejo, por el enojo que sentía.</div><div style="text-align: justify;">Tenía unos mechones de cabello en la frente, oscureciéndole los ojos, pero ahora estábamos cerca de la luz, y podía notarle un azul muy oscuro.</div><div style="text-align: justify;">¿Impulso? ¡A la mierda todo!</div><div style="text-align: justify;">Me levanté, y me puse frente a él. Pude distinguir la sorpresa en sus facciones. </div><div style="text-align: justify;">Lo agarré del cuello, y dudé un solo segundo, pero le encajé un beso.</div><div style="text-align: justify;">Liam quedó duro como una piedra, pero yo insistí. No sentía nada, es que la ira me llenaba todo, no había lugar para sentirme avergonzada o estúpida.</div><div style="text-align: justify;">Liam entreabrió la boca entre la mía, generando una respuesta. Se levantó del banco lentamente, atrayéndome a él con una mano en la cintura, y la otra en la nuca. Mis dedos se clavaron en su cabellos, despeinándolo. Era suave, como alguna vez imaginé que sería al tacto.</div><div style="text-align: justify;">La ira desapareció, pero el calor aumentó. Como si mi sangre hubiera llegado a punto ebullición, y se extendiera por mis venas. Sus labios buscaban los míos con una desesperación muy poco refrenada. Yo intentaba corresponderle con la misma energía, pero empezaba a sentirme mareada y sin fuerzas. La cabeza me estallaría en cualquier momento.</div><div style="text-align: justify;">Una mano se deslizó por su cuello, hasta notar el cierre de la campera. Siguió abajo hasta su pecho y lo alejé lo suficiente como para darme un respiro.</div><div style="text-align: justify;">Liam se separó casi a regañadientes, pero sus brazos siguieron a mi alrededor.</div><div style="text-align: justify;">Como ya no había mas ira, me sentía avergonzada y estúpida. Las orejas y las mejillas me ardían, pero lo demás se volvió frío como un témpano, me imagine que el calor se congeló en un suspiro. </div><div style="text-align: justify;">No podía mirarle a la cara. Pero un dedo bajo mi barbilla, me hizo levantar la mirada. Aunque me rehusé a mirarlo a los ojos.</div><div style="text-align: justify;">—Emily —Susurró. Pero yo miraba a un costado. Me moría de vergüenza. El era mi mejor amigo, y arruine todo—. Ey —Insistió él.</div><div style="text-align: justify;">Se me escapó una mirada a su rostro. Y me observaba pacientemente, sin que le molestara la cercanía. El muy obstinado no se iba a mover un centímetro hasta que lo mirara, y yo no lo soportaba más. Asíque clavé mis ojos en los suyos.</div><div style="text-align: justify;">—¿Por qué hiciste eso? —Inquirió.</div><div style="text-align: justify;">Yo... No tenía idea ni de a dónde tenía las manos puestas. Las moví levemente, y una estaba apoyada en su hombro, en tanto que la otra en sus costillas.</div><div style="text-align: justify;">Yo acabo de besar a mi mejor amigo. Hice lo que se me ocurrió, como había dicho que haría... Esto... Tengo que olvidarme de cualquier prototipo también, al parecer. ¿Qué acabo de hacer?</div><div style="text-align: justify;">No se qué hacer. Acabo de cortar cualquier guía que me sirviera de ayuda en qué hacer. No soy prudente, o grosera, o amable, o responsable, ahora no soy nadie.</div><div style="text-align: justify;">Bien, mi error. Debería pensar más en eso.</div><div style="text-align: justify;">—Se me ocurrió y lo hice —Contesté desviando la mirada.</div><div style="text-align: justify;">Su dedo bajo mi barbilla me hizo volver el rostro, otra vez.</div><div style="text-align: justify;">Acercó su rostro aún más, entorpeciéndome en todo sentido.</div><div style="text-align: justify;">—¿Y si se me ocurriera besarte? —Preguntó en un susurro. Mi respiración se aceleró, y se me nubló la vista. O.. No, mis ojos se cerraban sin mi permiso.</div>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-20300738240911539192011-11-16T09:12:00.000-08:002011-11-16T09:12:45.104-08:00Capitulo 10¿Liam?<br />
¿Ryan?<br />
¿Liam?<br />
¿Ryan?<br />
O mejor… ninguno.<br />
¿Quién dijo que tenía que estar con alguno?<br />
Además, “ninguno” es la respuesta.<br />
Liam es mi mejor amigo. Y Ryan… Él no.<br />
Ni siquiera debería considerarlo como opción. Porque la respuesta es NO.<br />
—¿Te acompaño? —Preguntó Liam a mi lado.<br />
No quiero herir los sentimientos de Liam, con toda la confusión que tiene.<br />
—Si quieres… —Dije sin compromisos.<br />
Su mirada lo dijo todo. Levantó las cejas para mirarme fijamente, recriminándome.<br />
No me quería obligar a nada, pero… ¡Claro que quería acompañarme! Y le molestaba mi respuesta.<br />
Bufé. —Claro que si, ¿Por qué no? —Dije levantándome sin mirarle.<br />
Pude ver que él también se levantaba, así qué me quedé a espaldas esperando que se me uniera.<br />
No se, me esperaba que intentara algo, como acercarse a mi, o algo por el estilo.<br />
Por el contrario, paso por mi lado.<br />
—Vamos. —Dijo al pasar.<br />
Me sonó un poco rudo. Sobretodo por que Liam siempre fue tan… atento.<br />
Lo seguí por detrás sin hacerme esperar.<br />
Dimos la vuelta al edificio para salir a la calle, y empezar a caminar<br />
—No comprendo como haces en clases. —Empezó.<br />
—¿Cómo hago el qué? —Pregunté sin entender.<br />
—Mantener las calificaciones. —Responde con humor.<br />
—¡Ah! No lo hago. —Comenté riendo. Hice una pausa a modo de broma, para luego contestarle: —Bueno, ya, están bajas, pero nada irreversible.<br />
—Deberías prestarle más atención. Uno nunca sabe.<br />
Él siempre ha mantenido su promedio, para poder conseguir una beca y entrar a la universidad. Esa es su meta. Lo cual admiro, porque lleva mucho tiempo trabajando en ello.<br />
Quizás sus padres piensen otra cosa sobre el estudio, para que recurra a una beca como escape.<br />
Tampoco es que sus padres sean millonarios, pero podrían pagar su estudio sin problemas.<br />
—Como digas, “nerd” —Bromeé. Rompiendo el hielo.<br />
Él no podía creer lo que le había dicho y reaccionó con un suave empujón hacia mi dirección.<br />
Esto era amistad, ¿Cómo se puede arruinar?<br />
—¡¿Qué?! ¡¿Acaso no es cierto?! —Exclamé observándolo.<br />
Estaba bien. Se supone que estoy actuando “normal”.<br />
Se limitó a negar con la cabeza con fingida reprobación, para luego reír. Una risa suave, fácil.<br />
—¡Bien! No le hagas caso al “nerd” Pero luego atente a las consecuencias. —Amenazó con mofa.<br />
—¿Qué tal las tuyas? ¿Arriba de 8?<br />
—De hecho, arriba de 8,5. —Contestó con aire de superioridad.<br />
No me quedó nada más que reír.<br />
Caminamos en silencio un par de calles, y no pude parar de pensar en que Liam me había besado, y que gustaba de mí, y que aquí estábamos.<br />
—¿Por qué Liam? —Le encaré mirándolo de reojo.<br />
No hizo falta explicar nada para saber a qué me refería.<br />
Solo me miró apretando los labios. Y todo siguió en el mismo silencio. Escuchando solo nuestros pasos.<br />
Observé como guardaba sus manos en los bolsillos del Jean.<br />
En la esquina próxima a mi casa, me planté para que se detuviera ahí.<br />
Quedó de espaldas a mi, a unos pasos de distancia. Observé su movimiento.<br />
Dio media vuelta, y se acercó a mi, quedando frente a frente.<br />
—¿Por qué tú? —Dijo con nostalgia.<br />
Asentí una sola vez, y esperé su respuesta.<br />
—¿Por qué Ryan? —Preguntó con pena.<br />
Comprendí que ambos estábamos sufriendo.<br />
—Los mejores amigos son los novios que nunca serán. —Comentó alejándose.<br />
«Si, la pareja perfecta que nunca será.»<br />
Me quedé donde estaba mientras dejaba volar sus palabras.<br />
—Supongo que no quieres que te acompañe hasta allá. —No era una pregunta., pero asentí.<br />
—Bien, entonces, nos vemos… el lunes, supongo. —Se acercó a saludarme, y se fue, doblando en la esquina.<br />
Me quedé como boba ahí parada, sin hacer nada por un rato.<br />
Los mejores amigos no son novios por eso. ¡Porque son amigos!<br />
Porque ser novios arruinaría toda la amistad, porque ya no se confiarían secretos, porque ya están otras “prioridades” y lo divertido se vuelve serio.<br />
No quiero perder a Liam como mi amigo. Ha sido tan fiel conmigo que no quiero perderlo así.<br />
Me vino la depresión del solo pensarlo.<br />
Se me hizo un nudo en la garganta, que no me dejaba tragar, y los ojos se empezaron a nublar.<br />
Miré para arriba, y no permití que esa lagrima cayera.<br />
<br />
Mi estilo de vida se había convertido huraño. Mi estimulo de vida lo apagué por un rato, porque no quería andar llorando como una niña tonta que la botaron. Pero en vez de eso, arruiné mi vida. Seguía siendo yo, pero en automático. Lo único que quería era dormir. Por lo menos así, todo se acababa de algún modo. A veces, me obligaba a despertarme para ir con Helen, y seguir siendo su amiga.<br />
La verdad, ni yo misma puedo describir como era en realidad. Porque estaba allí, y hablaba con mis amigos, me juntaba con ellos de vez en cuando; y a la vez, no estaba.<br />
Pero ya estoy cansada.<br />
—Em, ¿Vas a cenar? —Preguntó Malcom apoyado en el marco de la puerta. No lo había escuchado acercarse.<br />
Lo observé a oscuras.<br />
¿Cómo puede ser que no supiera nada de la vida de mi hermano? Tan protegida que me sentía a su lado, ahora ya no me satisfacía.<br />
—Si volviste a hacer tu comida de perro, entonces no. —Bromeé.<br />
Al principio me miró pestañeando, sin comprender. Pero al cabo de un segundo sonrió.<br />
—Vas a lamer el plato del perro con tal de comer más. —Presumió.<br />
—Ok. —Acepté levantándome de un salto, para ir con él. Casi me tropiezo con una bola de ropa que había dejado tirada a la mañana. Entonces volvió a reír.<br />
—Te extraño, hermanita. —Comentó dándome la mano para ayudarme.<br />
Lo miré perpleja, deteniéndome.<br />
—No me he ido a ningún lado. —Titubeé.<br />
—Exacto. —Coincidió. ¿A qué se refería?<br />
Después de ayudarme, caminó hacia la cocina y se dio media vuelta para mirarme.<br />
—¿Vas a comer o no? —Preguntó esta vez con un tono desinteresado.<br />
—¿Y mamá? ¿Y papá? —Quise saber. No los había visto en todo el día, lo cual a pesar del alivio, me resultó extraño.<br />
Malcom se volvió dentro de la cocina, ignorándome.<br />
La casa estaba a oscuras. En la sala de estar había una pequeña farola encendida, llenando de una luz tenue, que contrastaba con la luz blanca y brillante de la cocina que asomaba por la puerta, y me hacia entrecerrar los ojos.<br />
Suspiré y entre en la cocina.<br />
Malcom estaba revolviendo salsa en el fuego. El aroma que despedía me hizo rugir las tripas.<br />
—Mamá se queda hasta tarde en el trabajo. Y papá… él… supongo que se siente inútil, odia tener que admitir que mamá es la que mantiene todo esto. Así que se fue a sus pagos. Ya sabes, la historia de la vida.<br />
«Si, inútil. Ya lo creo…» pensé con sarcasmo. Si así fuera, movería el culo del bar al que va tan seguido, y buscaría un trabajo fijo. Dejaría de gastarse la plata en alcohol, y por ultimo, aportaría algo a esta casa.<br />
¿Quién creería eso?<br />
—Mejor así. ¿Quién quiere tenerlo aquí dentro?<br />
Malcom meneó la cabeza y exhaló con fuerza. Apagó el fuego, y abrió la puertita del estante sobre su cabeza para sacar un plato.<br />
Repentinamente dejó todo, y se volvió para verme con una insistencia incomoda.<br />
—Emily, por el amor de Dios, deja de vivir en el pasado y en tu mundo, para volver a la realidad. ¿Si? —Asentí sin estar segura de poder hablar, pues me tomó por sorpresa. —Ya sé, piensas que me volví loco, y no me importa. Pero te veo despierta, y sé que ahora me escuchas. Hablo de que… me escuchas de verdad, y no me sonríes diciendo alguna cosa indiferente para meterte en tus asuntos.<br />
«Alguna cosa indiferente» Repitió mi mente, ofendiéndome. Yo no decía alguna cosa indiferente, ¡Yo escuchaba todo! ¡Y lo que decía era con sentido!<br />
—Que ridículo. —Protesté.<br />
—¡Eso! ¡Eso haces! ¡Respuestas que terminan todo tipo de conversación!<br />
—Malcom, te estoy escuchando. —Espeté enojándome. —Y en realidad, es ridículo lo que dices. Sé lo que digo, y es distinto la “indiferencia” a que no te guste mi respuesta. —Expliqué con resentimiento. —No tiene sentido nada de lo que dices. ¿Qué quieres decir con tanto teatro “te extrañé”, “la historia de la vida”, “vuelve a la realidad”…? —Añadí a regañadientes la ultima. —Ve al punto. —Exigí.<br />
Él volvió a darse media vuelta para sacar el bendito plato y servir un cucharón de salsa, para luego colocar una bola de espagueti. <br />
—Me voy a ir de casa. —Comentó con tranquilidad.<br />
Me asombró. Si creía que la vida no podía ir peor… me equivocaba. Siempre me equivocaba.<br />
—¿Por qué? —Se escapó de mi boca lastimeramente, y me odié por ello.<br />
Sirvió el otro plato, y los llevó a la mesa sin decir palabra. La mesa ya estaba servida, con la vajilla en una punta y en la otra. Pero él siguió como si nada, abriendo la heladera para sacar una jarra de jugo fresco, y lo colocó exactamente en el medio de la mesa, prosiguiendo a sentarse.<br />
Enojada, me senté y lo miré con recelo.<br />
—¿No puedo saber por qué te vas?<br />
—¿No crees que es demasiado obvio? —Preguntó dejando caer el cubierto que había alzado. —Ya estoy bastante grandecito para vivir de mis padres, Emily.<br />
—Pero ¿A quién le importa? Estamos bien así. Es decir…<br />
—Tienes serios problemas con los cambios, Emily. Hazte ver. —Me cortó con crueldad.<br />
Un sollozo ahogado resonó en mi garganta sin querer.<br />
—En ese caso… Lo siento por no querer que te vayas. —Escupí levantándome con fuerza de la silla, para salir.<br />
Esperé a estar fuera de casa para dejar entrever las vergonzosas lagrimas.<br />
La noche estaba tranquila. Un poco fresca, pero no lo suficiente como para hacerme tiritar. Me refregué el rostro con el dorso de la mano, y empecé a caminar hacia el instituto, porque era el único lugar que conocía a donde ir. Era de noche, y estaba consciente de que no podía ir al parque o algún lugar como tal. Pero tampoco podía ir al instituto a estas horas.<br />
Helen.<br />
Mi mejor amiga. Podría ir a su casa.<br />
En realidad, podía volver a mi casa y encerrarme en mi cuarto. Pero estaba tan apenada de volver a esa casa. ¿Por qué se tiene que ir? Entiendo que algún día iba a pasar, pero… ¿Por qué ahora?<br />
No tengo derecho. No tiene por qué quedarse en casa, solo para verme ir y venir sin decir nada. Pero verme a mi misma en la casa a solas, hacia que el corazón se me encogiera.<br />
Desde ya me sentía sola y angustiada. No necesito más.<br />
«Serios problemas con los cambios» Dijo. Bien, y ¿Qué se supone que debo hacer? ¿Saltar de alegría? ¿Por qué? La única persona en esa casa con la tengo una relación aceptable es él. Mamá no cuenta. Ella es simplemente mamá.<br />
Volví a limpiarme las lagrimas, intentando calmarme, pero solo caían más.<br />
Me senté en el cordón de la calle. Y lloré hasta calmarme al fin. No me gustaba llorar, pero últimamente lo hacia a menudo.<br />
El ceño se me fruncía y las lagrimas volvían a atacarme incontrolablemente cuando pensaba en Malcom.<br />
Entonces decidí dejar de pensar en ello.<br />
Helen. ¿Qué le voy a decir?<br />
Simplemente… toco la puerta rezando que abra ella y no su familia. Y le digo ¿El qué? “¿Hola, me puedo quedar esta noche porque... Mi hermano se va de casa?”<br />
Eso no tiene sentido. De todos modos, ella entendería, ¿No?<br />
Mi celular comenzó a vibrar en el bolsillo del Jean. Lo saqué sabiendo quién podría estar llamando, así que contesté sin siquiera mirar dos veces.<br />
—¿Qué? —Pregunté groseramente.<br />
—¿A donde fuiste? Vuelve ya a casa.<br />
—¿Porqué iba a hacer eso? ¿Acaso tu lo harás? —Contraataqué. Hubo un corto silencio.<br />
—¿A dónde estas? —Inquirió con una tranquilidad repentina.<br />
—Adivina, idiota. —Colgué.<br />
Si, sabía que estaba siendo irracional y caprichosa, pero no me importaba ya nada. Me levanté temerosa de que de repente alguien me viera. Mi hermano, papá o mamá se acercaran para buscarme. No estaba lejos de nada, en absoluto, y si Malcom salía a buscarme, tenia altas posibilidades de encontrarme. Y yo no me quería enfrentar a ello todavía.<br />
Por lo que empecé a caminar de vuelta en dirección a la casa de mi amiga. El celular vuelve a vibrar, por lo que atiendo sin decir nada.<br />
—¿Hola? ¿Emily? —Era la voz de Liam, preocupada desde el otro lado del celular.<br />
—Ah, hola Liam. ¿Qué pasa?<br />
—Eso mismo me preguntaba yo. Tu hermano me llamó preguntando por ti.<br />
—¿Mi hermano hizo eso? —Pregunté incrédula.<br />
—Hummm... Si. ¿A dónde estas Emily? —Sonaba preocupado.<br />
¡Oh, genial! Si Malcom lo llamó a él, pensaba que estaba en su casa. Y si yo le digo a donde estoy, o mejor dicho, a donde voy... Le va a decir a Malcom. No hay nada como alguien preocupado por ti, que haga que la gente se vuelva histérica contigo.<br />
—Yo... No le hagas caso a Malcom, estoy bien.<br />
—Emily... —Protestó.<br />
Pensará que no tengo la suficiente confianza en él como para decirle, y me rompe el corazón. Él mas que a nadie es en quien confío.<br />
—No te preocupes. Te llamo luego. —Me despedí. Antes de escuchar otra queja, colgué.<br />
Por la calle del frente paseaba un señor calvo con su perro. Estaba vestido de gimnasia como si, fuera o viniera de entrenar. Me ponía nerviosa estar a la vista de alguien. Me hacia pensar que a lo mejor se reirían de mi o algo.<br />
Impaciente, caminé a paso más enérgico, cuando el celular volvió a vibrar en mi mano. Me fije en la pantalla que dictaba "Helen"<br />
—¿Hola?<br />
—¡Emily! ¿Donde rayos estás?<br />
Declaro que cuando me cruce con Malcom de vuelta, le voy a pegar una patada en el trasero tan fuerte, que no va poder sentarse ni estar parado.<br />
—Hola Helen. —Saludé cansada.<br />
—Tu hermano me llamó preguntándome si estabas aquí. Entonces, como no estas aquí ni en tu casa. ¿Donde estás? —Me asombraba que Helen pudiera ser peor que cualquier madre.<br />
—Yo... Pensaba ir a tu casa.<br />
—¿Si? —Ahora sonaba mas tranquila. —¿Qué tan lejos estás?<br />
—Ya casi llego.<br />
—¡Perfecto! Te espero, y preparo...<br />
—Pero —La corté. —No quiero molestar, así que... Si fuera posible que tus padres...<br />
—Ah, ya. No te preocupes.<br />
—Otra cosa..<br />
—¿Si?<br />
—Me debes lealtad a mí, y no a mi hermano. —Ella rió despreocupada.<br />
—Tranquila, Em. Soy tu amiga, no voy a delatarte.<br />
—Ok, gracias.<br />
—Te espero.<br />
El resto del trayecto intente mantener la mente en blanco, pero una vocecita preguntaba «¿Qué vas a hacer?»<br />
«No lo sé». Le respondí.<br />
Helen estaba en el porche de su casa, sentada en las escaleras, esperándome. Las luces de su casa y la del porche le daban la espalda, y cuando alzó la vista para verme llegar, tenia el rostro lleno de sombras que le hacían rasgos extraños por momentos.<br />
—Hola Helen. —Saludé al acercarme.<br />
—Emily, ¿Qué pasa contigo? -Su tono era de reprobación total.<br />
—Lo se, pero entiende Helen. No quería quedarme en mi casa.<br />
—¿Por qué? ¿Qué pasó? —Preguntó haciendo un ademán con su mano a su lado, para que me sentara con ella.<br />
Podía recordarla en mi sueño. Con las mejilla encendidas al mirar a Derek, el "morocho", porque quería que la ayudara. Ella tenía vergüenza, y ahora está en frente mío, exigiéndome saber qué me pasa.<br />
—Malcom quiere irse de casa. Y no pude soportarlo. —Exprese con tristeza, mientras me sentaba en los escalones.<br />
—¿Es tan malo?<br />
—Es todo cuanto tengo allí, Helen. Es la razón que no me sienta tan sola. Y... Quien me protege.<br />
—Pero, Emily, si él es todo eso, ¿Por qué le haces esto? Llamó a mi casa para decirme que si te veía o si sabia algo le avisara.<br />
—¿Y lo hiciste? —Pregunté con un deje de desesperación.<br />
—No. —Contestó después de un rato. —Pero, aun así, él está preocupado. No creo que sea justo.<br />
Como toda buena amiga, además de aconsejarte... Te dicen la cruda verdad.<br />
—Nada es justo. —Espeté. —¿Porqué tengo que preocuparme en ser justa con los demás, si nada lo es conmigo?<br />
—Porque hay que aceptarlo como es. Emily, déjalo ser. Déjate llevar por la vida.<br />
—Creo que lo hice cuando salí de casa.<br />
—Esta bien. —Reflexionó mirando al frente. —Si, esta bien.<br />
Nos quedamos mirando la noche, que estaba tranquila y silenciosa a pesar del silbido del viento.<br />
—Yo... No me sentiría bien si uno de mis hermanos se escapa de casa a la noche.<br />
Yo tampoco me sentiría bien. De hecho, no me siento bien. Se que dentro de poco mi mamá o mi papá llegara a casa, y no se que dirán.<br />
Mi corazón late fuerte, pero cada latido es un golpe. En este momento quisiera que no latiera más.<br />
Tengo que hacer lo correcto. Tengo que... Cambiar esto, y hacer lo correcto. Tengo que... Enderezar el palo torcido que soy. Y tengo que... "dejarlo ser" y "dejarme llevar por la vida".<br />
—La decisión es tuya, Em. Puedes quedarte en casa esta noche, por supuesto, pero yo solo intento que entres en razón. —Comentó al cabo de un rato sin mi respuesta.<br />
—Lo sé, y gracias. Debería hacer esto más seguido.<br />
Se asombró ante mis palabras. O se horrorizó, no lo podría definir.<br />
—Oh, no. Hablo de hacer esto, hablar, que me aconsejes y eso.<br />
Dibujó una media sonrisa en su rostro.<br />
—Si. Eso creo. Yo... Pensaba que... —Titubeó.<br />
—¿Qué...?<br />
—Pensaba que te habías cansado de mí, o algo. No lo sé, algo que yo hice pudo molestarte... Y... No lo sé, quizás ya no éramos tan amigas. Es decir, si somos amigas, pero no como antes. Como si hubiera una hoja de papel entre nosotras, ¿Entiendes? Algo pequeño, pero que de repente, nos separa unos centímetros.<br />
—Si, lo siento. —Fue todo lo que pude decir.<br />
—Tenemos que esperar a que mis padres suban a su habitación, para así poder entrar sin que ellos sepan que estás aquí. —Planeó.<br />
—Hummm… Creo que tienes razón. Sobre mi hermano. Será mejor que vuelva.<br />
—¡Oh, si! —Exclamó con alegría.<br />
—Otra vez, Gracias. —Helen se acercó y me abrazó.<br />
—¿Para qué estamos las amigas, sino? —Susurró, y luego se alejó poniéndose de pie. —¿Vas a estar bien? Es de noche y...<br />
—Todo va a estar bien. —Le prometí.<br />
Nos despedimos con una sonrisa, y me di media vuelta para retomar mi camino.<br />
Seguía sin tener ganas de volver a casa, pero Helen tenía razón, y quizás Malcom estaría mal y preocupado por mi.<br />
Saqué mi celular del bolsillo, y marqué.<br />
—Emily, ya. Vuelve ya mismo a casa. —Atendió al segundo.<br />
—Lo siento, Malcom.<br />
—Lo siento yo también. —Se atropelló en decir. —Supongo que te defraudé.<br />
—No te preocupes. Yo... No quería aceptar que la única persona que me quedaba, me iba a abandonar. Pero estaba o estoy equivocada.<br />
—Ven a casa, así hablamos. —Sugirió con apuro, y se me vino a la mente mis padres.<br />
—¿Ellos lo saben?<br />
—¿Quienes?<br />
—Mamá.<br />
Se escuchó que respiraba con fuerza.<br />
—Si.<br />
—No quiero ponerte en problemas, así que... Puedes decirle que he ido a casa de Helen. Lo cual no es mentira. Dile que esta noche me invitó a dormir.<br />
Hubo un pequeño silencio, que decidí romper yo, porque la duda me podía.<br />
—¿Qué dijo ella al respecto? ¿Por qué no me dijiste a mi?<br />
—Te dije, y mira lo que estás haciendo.<br />
—Me... No es... Porque... —Tartamudeé sin tener una idea concreta. —Hay otras formas de decirlo. —Concluí airosa.<br />
—Supongo que si, ¿Vas a estar en casa de Helen, en realidad?<br />
—Si. —Mentí. —Déjame en paz. Solo necesito pensar. Ya te dije que lo sentía y que no te preocupes.<br />
—No estoy de acuerdo. Pero recapacita todo lo que quieras, a lo mejor veas las cosas más claras.<br />
—Lo haré. —Colgué.<br />
Ya era bien entrada la noche. Y tengo que admitir que me daba miedo andar sola. Cualquier ruido hacia que se me saltaran los ojos de las orbitas, por mirar qué lo había producido. Pero tenía que tener la mente fría para pensar a donde estaba yendo, y a donde ir.<br />
En la calle de enfrente doblaron por la esquina dos chicos jóvenes, que parecían venir o ir a una fiesta por las ropas que llevaban. También parecían un poco borrachos por la forma en que caminaban, desgarbados.<br />
Guardé el celular que lo tenía en la mano y seguí caminando más rápido. Me dije que doblaría a la vuelta para perderlos de vista, por las dudas, pero me rehusé a ser paranoica, y seguí de largo.<br />
Ellos venían por la calle de enfrente, murmurando, un poco más atrás que yo. Pues, había empezado a caminar más rápido.<br />
Hubo silencio, porque de repente dejaron de murmurar. Fue entonces que dejé que la paranoia se apoderara de mi, e iba a salir corriendo a penas doblara la próxima esquina. Pude notar que caminaban en diagonal, como cuando uno va a cruzar. El corazón se me salía por la boca, pero apreté el paso, aun más.<br />
Alcance la esquina cuando ellos comenzaron a cruzar hacia mi, y empecé a correr. Después de unos segundos escuché sus risas que provenían de la esquina. Es decir, ni se molestaron en seguirme. Y en ese momento me di cuenta que hice el ridículo, porque ellos no eran malos.<br />
De todas maneras, seguí corriendo por un rato. Había una frase que me consolaba "Mejor prevenir que curar".<br />
Paré después de un rato, porque los pulmones me quemaban. Y el aire que respiraba me era insuficiente, quería más. No importaba cuan profundo respirara, quería más. Profesores de gimnasia decían que no debía parar abruptamente cuando se corría por un tiempo, sino que había que mantenerse en movimiento hasta recuperar el aliento, así que empecé a caminar de nuevo.<br />
Recuperándome de a poco, noté que conocía las casas que veía al caminar.<br />
Si, las conocía. Liam vivía por acá. En la otra cuadra para ser exactos, doblando a la izquierda, en mitad de cuadra.<br />
"Déjate llevar por la vida" vino de repente a mi mente.<br />
Bien, no podía quedarme vagueando por ahí, a estas horas. Y mucho menos después de la bromita que me hicieron. Es mi amigo, después de todo. ¿No?<br />
Si, un amigo que no quisiera ser mi amigo, sino algo más.<br />
No podía pensar en Liam como eso. Como un… chico. Era extraño, es como que de repente, algo que creías seguro, tangible, conciso, se transforma en algo lejano e inalcanzable, y que el cambio intenta comerte la cabeza al pretender descifrar qué causó tal cambio. Tal diferencia también te descoloca y ya no sabes qué reacción producir. Entonces todo lo que conocías se evapora, y empieza todo de nuevo.<br />
Doblé en la esquina, y las manos comenzaron a sudarme. Quise darle el merito a que corrí como una desquiciada, pero no era convincente que justamente me sudaran las manos por ello.<br />
Quiero hacer las cosas bien, quiero arreglar las cosas rotas, y Liam es una de ellas, tanto como todo lo que me rodea, que lo estropeé bastante, por cierto.<br />
Ya no hay vuelta atrás. Voy a sacar el "reverse" del cambio, para poner "primera" en mi vida.<br />
Avanzar se ha dicho.<br />
Yo quiero avanzar, pero a veces soy medio torpe y abandonada. Quiero avanzar, pero no quiero enfrentarme a las cosas. Es mucho más fácil sentarse a ver, que interferir. Pero es tiempo de hacer algo al respecto.<br />
La casa de Liam, se levantaba ante mi, como una gran montaña. Era de dos pisos, luciendo renovada y moderna a comparación de mi casa.<br />
Había una luz en una de las ventanas del piso de arriba. Supuse que era la habitación de los padres, porque la habitación de Liam estaba ubicada al fondo. Su ventana daba al patio trasero.<br />
¿Cómo hago ahora?<br />
Me dirigí al costado de la casa, en donde había una puertita de madera cerrada con una simple traba desde adentro. Si pudiera sacarla...<br />
Estiré el brazo logrando pasar por arriba de la puertecilla, poniéndome de puntillas y apretándome a la puerta, pude tocar con mi dedo índice la traba. Solo tenia que correrla.<br />
Se podía decir que casi estaba parada sobre el dedo gordo del pie, del esfuerzo que hacia para alcanzar la traba. Seguí rozando la traba, hasta escuchar el chasquido que indicó que al fin la pude correr.<br />
Suspiré del alivio. Ya se me estaban acalambrando los dedos.<br />
Entré con sigilo, recordando con alivio que a su madre no le gustan los animales, y no pueden tener perro.<br />
Rodeé la casa, prometiéndome que si no veía signos de vida de Liam desde la ventana, me iría de allí.<br />
Me invadió una tristeza enorme cuando no vi ninguna luz encendida, y todo oscuro y tranquilo en su lugar.<br />
Busqué alguna excusa, pero me dije que no le molestaría y me iría. Así que di media vuelta cabizbaja, para volver al pequeño pasillo.<br />
Ahora me preocupaba la traba. ¿Como la iba a poner de nuevo?<br />
Deje de pensar en la estúpida traba, cuando escuché un chasquido casi imperceptible. Y luego algo venía detrás de mi. Quise darme la vuelta para observar horrorizada que si poseían un gran perro asesino, o que alguna cosa venía a atacarme. Pero no tuve tiempo. Fui derribada con fuerza, cayendo al piso, golpeándome brazos y piernas al intentar amortiguar la caída.<br />
—Mierda. —Maldije, sintiendo un peso aplastante sobre mi, y punzadas en el codo derecho.<br />
Era una persona, pensé irónicamente. Respiraba agitado en mi oreja.<br />
—Maldito... —Empezó a decir, mientras cambiaba de posición, pero seguía sobre mi. De repente, me giró bruscamente y sin miramientos, dejando la frase inconclusa .La voz no solo era masculina, sino también conocida.<br />
Cuando me giró hacia arriba, y pude enfocar los ojos en la persona, vi los rasgos familiares de Liam.<br />
—¿Emily? —Profirió con toda la perplejidad reflejada en su voz.<br />
Yo también estaba confundida. Lo único que pude hacer, fue mover con dificultad el brazo en una posición menos dolorosa, y acomodando las piernas bajo su peso.<br />
Parecía que estaba en shock, porque lo único que hacia era observarme parpadeando consecutivamente.<br />
—¿Que...? —Intentó preguntar, pero volvió a callar. Por mi parte, solté un tenue gemido de dolor cuando su peso se balanceaba sobre mí.<br />
Liam, abrió los ojos como platos, como si se hubiera despertado de un sueño. Y se levantó abruptamente.<br />
—¡Oh, lo siento! ¡Lo siento tanto! ¿Qué…? ¿Cómo... ?<br />
Me ayudó a ponerme en pie de vuelta, con delicadeza.<br />
—¡Vaya! Pensé que querías matarme a golpes. —Exclamé con sorpresa.<br />
—¡No! —Negó rotundamente. Me pasó un brazo por la cintura para ayudarme a caminar.<br />
La verdad, que no lo necesitaba. Lo único que quería era sobarme las piernas hasta que acabara el dolor, pero no podía hacer eso. Así que me reconfortó ese brazo.<br />
—¡No! —Repitió con mas calma. —¡Lo siento tanto! Yo... No sabía que eras tu.<br />
—Entré para ver si estabas despierto, y como vi tanta oscuridad, supuse que estabas durmiendo. -Expliqué. -No quería molestarte. —Estábamos en el patio trasero, y había mucha mas luz que en ese pasillo diminuto. Examiné el codo, que seguía punzando. —Y al final, saliste corriendo como un loco a atacarme. —Finalicé con asombro.<br />
Es que... No podía creerlo. Liam era un tipo pacifico, de esos que dicen "hablemos" antes de irse a las manos.<br />
—Lo siento tanto. —Repitió apenado. —Es que... No sé que pasó. Yo estaba sentado, mirando por la ventana, pero en realidad no estaba mirando, yo solo... Pensaba. —Contaba, mirando un punto fijo de la casa. Los ojos le brillaban bajo la escasa luz. Y me di cuenta tristemente que no recordaba un gesto como tal, corroborando que, ahora todo era una percepción nueva. —De repente, un movimiento captó mi atención en la oscuridad, y no lo pensé dos veces. Y si, quizás fue lo mas estúpido del mundo, ahora que lo pienso, pero no me detuve a pensar en ese momento. Salí enfurecido, porque no podía creer que esto estuviera pasando ante mis ojos. Pensé que eran ladrones o asesinos o vagabundos, borrachos, ¡No lo sé! Cualquier cosa que no fueras tú.<br />
—¿Qué pretendías hacer después? —Pregunté con curiosidad.<br />
Cuando me dio la vuelta para arriba con violencia, no parecía que quisiera hacer mucho más que eso. Insultarme, quizás.<br />
—No lo sé... —Divagó con la mirada, para luego observarme. —¿Estas bien? Lo siento.<br />
—Supongo que si. —Levanté por sobre el codo la camisa, para confirmar que estaba todo bien. Era solo un rasguño, nada importante. —Unas tres gotas de sangre, quizás. —Calculé.<br />
—Lo siento tanto. —Repetía una y otra vez. Tomó mi brazo que sostenía en el aire para observar también el daño.<br />
—Moriré desangrada, deberías sentirlo. —Concluí.<br />
—Ven, vamos a lavar eso. —Comentó dirigiéndose a la puerta trasera.<br />
—¡No! —Tire de su brazo que tenía en la cintura para ayudarme y empujarme hacia adentro. —No quiero que me vean tus padres... Seria... Vergonzoso. —Confesé, poniéndome nerviosa.<br />
—¿Por qué piensas eso? Vamos. —Instó.<br />
—No, en serio. —Insistí, plantándome al suelo. —No quiero molestar, ni que me vean así. Yo... Entré a su casa sin permiso, y... Te hice asustar... Y... No debería estar aquí. Mira la hora. —Comencé a sentirme culpable.<br />
-Bueno, ya. Cállate. Vamos, sin que se den cuenta.<br />
—¿Si? —Pregunté insegura.<br />
—Ellos probablemente ya estén en el séptimo sueño, ni me escucharon bajar. Y créeme, hice mucho ruido.<br />
Convencida, me dejé arrastrar hacia la casa. Entramos, y estaba todo oscuro, justo como lo había visto.<br />
Las escaleras para subir a su habitación, estaban justo al lado de la puerta. Solo tuvimos que adentrarnos un poco, para subir, pues la escalera miraba al frente, y nosotros estábamos atrás.<br />
Me imaginé que los escalones crujirían, y sus padres nos escucharían, pero no fue así. Ningún escalón crujió. Todo estaba en perfecto silencio.<br />
Entramos a su habitación, que estaba bastante limpia. A pesar de unos pequeños objeto tirados por aquí y por allá. Ni siquiera la cama estaba con signos de haber sido usada.<br />
Liam cerró la puerta tras de si, y me empujó mas adentro.<br />
—Vamos, vamos. —Urgió.<br />
En el lado izquierdo de la habitación, había una puerta, a donde me guiaba, y a donde estaba el cuarto de baño.<br />
De las veces que visité a Liam, nunca tuve la necesidad de utilizar su baño. Así que era una sensación extraña utilizarlo justo ahora.<br />
Al entrar, Liam encendió la luz y abrió el grifo de agua.<br />
Entré un poco cegada, hasta acostumbrarme a la luz. El cuarto parecía comprimido. Como si tuviera la sensación de que si se le agregaba algún detalle más, no habría lugar para entrar.<br />
Extendí el brazo hacia él, que estaba de pie frente a la pileta, abriendo el grifo.<br />
—¿Lo lavo y ya? —Pregunté.<br />
—Estoy pensando... Tienes pelusas de la tela. No se si sacarlas ahora, o si se irán con el agua.<br />
Me encogí de hombros.<br />
—Ok. Déjame ver. —Acercó el rostro a mi brazo, para ver de cerca, mientras levantaba su brazo, delicadamente. Formando una especie de pinza con los dedos, se acercó y pellizcó a milímetros de mi brazo. Metió los dedos en el agua que seguía corriendo y repitió lo mismo. A veces me hacía una especie de cosquilla que me producía piel de gallina.<br />
Liam al notarlo sonrió.<br />
—Listo, lávate.<br />
Puse el brazo completo en la pileta, y dejé que el agua corriera por el.<br />
Al lado de la pileta, en el mínimo espacio que había entre esta, y la ducha, tenía lugar un estante de madera, pintado en blanco. Abrió las largas puertas, y sacó una gasa, con un liquido naranja rojizo.<br />
Embebió la gasa en el liquido, y le extendí el brazo. Lo colocó sobre la herida y rebuscó un poco más en el estante, hasta sacar una cinta adhesiva blanca. La puso en su lugar, para que la gasa no se moviera.<br />
Al salir del baño, lo miré frunciendo el seño.<br />
—Es solo un rasguño. —Protesté elevando la venda.<br />
—Me hace sentir menos peor. Al menos, morirás de cualquier cosa, excepto desangrada. —Comentó con gracia.<br />
—Bien. —Acomodé la manga de la camisa a su lugar, tapando el vendaje. —Quizás, todo esto sea sólo porque querías jugar al doctor. —Propuse.<br />
—No estas tan errada. —Respondió sentándose en la cama. —Bueno, voy a organizar mis preguntas, y mis suposiciones. -Comenzó. —¿Por qué viniste hasta aquí?<br />
—No lo sé, la verdad. —No iba a decirle que necesitaba a donde quedarme, porque sonaría grosero. —Creo que... No tengo otro lugar al cual recurrir.<br />
—Tus amigas. —Contradijo.<br />
—Si, creo que es eso. Fui a casa de Helen, y... Es como si estuviera gritándome con los ojos que lo que hago está mal. Y ya sé que estoy haciendo mal, pero quiero ser egoísta por un rato. Entonces estas tú... Y no siento esa mirada amedrentadora. —Solucioné.<br />
Su humor era cambiante, pero nunca me miraba culpándome. Solo... Aceptaba lo que era. Y es todo lo que necesito en este momento.<br />
—Tu hermano me llamó. Ya te lo dije...<br />
—Si, el muy torpe llamó a Helen también. —Agregué.<br />
—No dijo nada. Solo preguntó si estabas aquí. No deja entrever mucho a la imaginación, por lo que supuse que te habías ido de casa. —Hizo una pausa, y si esperaba que hablara, no lo hice. —Pero sé que no te fuiste para visitarme, y tomar el té.<br />
Me hizo acordar que no había cenado nada, y me dio hambre.<br />
—No. —Sonreí. —No lo soporto más. —Concluí derrumbándome contra el piso.<br />
Liam me miró alarmado, pero luego se calmó entendiendo, y se acercó lentamente para acuclillarse a mi lado.<br />
—¿Tu papá? —Intuyó sin éxito.<br />
—Todo, en realidad.<br />
—Nunca se está tan al fondo. —Opinó.<br />
—Puedes equivocarte.<br />
—No, en realidad no. —Terció. —Soy el nerd del curso. Esos tipos nunca se equivocan.<br />
—Pero yo si. Una, y otra, y otra, y otra, y otra...<br />
—Es que sólo ves la mitad de la cosas. —Me calmó con un brazo en el hombro.<br />
—Quizás. Porque si las viera completamente, conocería el fondo del fondo.<br />
—No crees realmente eso, ¿Verdad?<br />
—Una parte muy pequeñita no la cree, pero el resto si.<br />
—Esa parte pequeñita, se llama lógica, debes desarrollarla un poco más. —Convino con paciencia, casi como broma.<br />
—Quiero intentar rehacer las cosas. —Comenté llevando la cabeza para atrás, chocando con la pared.<br />
—Cuando quieras… —Ofreció encogiéndose de hombros, dejando caer su brazo de mí.<br />
Me percaté de que había una sillón, enfrentado a la única ventana de la habitación. Entonces pensé cuando dijo que estaba pensando, hasta que me vio.<br />
—¿En que pensabas? —Pregunté curiosa, ya que lo había pasado por alto.<br />
—¿Cuándo? ¿Ahora? —Giró el rostro para mirarme.<br />
—Antes de que llegara.<br />
Volvió a mirar al frente, frunciendo los labios.<br />
—Cosas.<br />
—Interesante… —Comenté, imitando fascinación. —¿Quieres que me vaya, así puedes seguir pensando en cosas? —Pregunté, esta vez con sinceridad.<br />
—Ya no tengo que pensar en ellas. —Respondió con calma, mirándome de reojo.<br />
—¿No? —Insistí. A lo mejor hablaría de una vez, si presionaba un poco más.<br />
—Te llamé porque estaba preocupado por ti. Y en vez de aclarar las cosas, me dejaste más preocupado todavía. Entonces, pensaba en que podría estar pasando por tu mente, sin éxito, por supuesto. Por lo que, me quedé reflexionando en que quizás, las cosas no estaban tan mal a como me las imaginaba. —Hizo una pausa, para luego mirarme. —Y ya no necesito pensar más en ello, porque estás aquí conmigo. —Finalizó como cuando uno cuenta un cuento, y llega la parte feliz.<br />
—Te dije que no te preocuparas, que estaba bien. —Le recordé.<br />
—Sin embargo, no estás aquí porque quieres, ¿No es cierto? —Prosiguió sin inmutarse ante mis palabras.<br />
—¿De qué hablas? —Pregunté confusa.<br />
—De que fuiste a casa de Helen. No viniste hasta aquí. —Me culpó. Miraba al frente, sin ninguna expresión en el rostro.<br />
—Siento que te sobrepaso. —Admití.<br />
—Pero siempre piensas en alguien más primero. —La amargura desbordaba en su voz. Era lo único que demostraba alguna emoción, porque seguía sin mover un músculo de su rostro.<br />
—¿Qué te pasa?<br />
—¿Qué me pasa? Me pasa que estoy cansado de que siempre me tengas en segunda línea, Emily. Me pasa que siempre soy el último. —Explotó elevando el tono de voz, casi a la histeria. —Y no importa cuan reconfortada te haga sentir, siempre vas a pensar en alguien más a la hora de elegir. Probablemente sea que eres masoquista, y que te gusta todo ese tipo de cosas. Como por ejemplo el elegir sufrir por Ryan, o no hacer nada por mejorar tu vida. Y quizás ya esté cansado de esperar que abras los ojos. —Gesticulaba con las manos nerviosamente. — Porque me pasa que soy tan masoquista como tú. En vez de olvidarte de una vez, sigo intentando ponerme en tu camino, para que me hagas a un lado una y otra vez. ¿Qué quieres? ¿Qué sea tan idiota como Ryan, para que me tomes en cuenta?<br />
—¡No! -Dije perpleja. —No quiero hacerte daño.<br />
-¿Mas del que me haces? No creo que lo logres.<br />
—¡Lo siento! ¿Si? ¿Crees que me gusta esto? ¿Eso crees? Pues, qué equivocado estás. Quiero arreglar las cosas. —Me defendí.<br />
—No creo que puedas arreglar esto. Es cosa mía, después de todo.<br />
—No es cosa tuya, cuando estoy involucrada<br />
—Es cosa mía cuando no puedo hacer nada para que cambies de opinión.<br />
—¿Qué me estás pidiendo?<br />
—Nada. Ese es el problema. No puedes darme nada que quiera.<br />
Las manos me temblaban, como si hiciera 10 grados bajo cero. Decidí cerrarlas en puños, para que se quedaran en su lugar.<br />
—Te amo. Es tan frustrante estar enamorado de ti, Emily. No te das una idea. Pero es todo mi culpa, ¿Entiendes? No tengo ningún derecho, pero me lo atribuyo de todos modos. Cómo si amar, te diera esa facultad. Yo no te pido nada Emily. Sólo necesitaba que lo supieras, porque, después de todo… Es imposible olvidarme de ti, pensando que pudo haber quedado alguna posibilidad entre nosotros. Ahora, viendo que no la hay, todo es más fácil… O al menos eso creo yo.<br />
Me gustaría corresponderle, me gustaría terminar diciendo “Ey, no seas idiota, yo también te amo.” Pero no estaba segura. Él era mi amigo, y no se le dice eso a los amigos.<br />
Era una necesidad decirle reconfortarlo, quería borrar ese sentimiento que lo perturbaba. Sin embargo, no quería plantar falsas ilusiones. Ni siquiera yo sabía si lo amaba. Porque, es obvio que lo amo, pero no de la manera en la que él quisiera.<br />
—Te mereces lo mejor. —Aseguré. —Y yo no estoy ni cerca de eso. —Admití con melancolía.<br />
—Pero tú serías capaz de hacerme sentir eso que tú dices que merezco. —Clavó la vista en sus manos, que ya estaban quietas, descansando en su regazo.<br />
—Si eso crees, pues ¡Vamos! —Exclamé desesperada. —Aquí me tienes. —Indiqué.<br />
Causaba tanto daño, que no podía soportar la idea de dejar todo así. Me desesperaba no poder hacer nada. No poder decir palabras que reconfortaran de la manera necesaria, no poder dar el aliento que se exigía.<br />
Me desesperaba ser la causante de su dolor.<br />
No me importa hacer lo que sea por mejorarlo, mucho menos si se trata de él.<br />
Liam me observó escéptico. Estaba incrédulo razonando mis palabras. A pesar de todo lo que me había dicho, su mirada seguía sin culparme de nada. Una lucecita siempre le iluminaba los ojos, quizás sea el color lo que causaba ese efecto.<br />
De repente su rostro se suavizó, y se calmó, mostrando una mirada tan serena, que me resultó extraña.<br />
Se puso de pie, extendiéndome una mano para acompañarlo, la cual no rechacé.<br />
Sentí cómo se me contraía el estómago, de puro nerviosismo, y cómo las piernas me flaqueaban.<br />
Sabía perfectamente lo que proseguía. Y el cuerpo no me ayudaba. Estaba rígido.<br />
Ya de pie, y a su altura, lo miré a los ojos, rindiéndome.<br />
Liam se acercó, con la misma paz y serenidad que lo invadió hace un rato, y no hice nada al respecto.<br />
Pero nada pasó.<br />
Me abrazó. Eso fue todo.<br />
—Discúlpame. —Pidió en un susurro junto a mi oído.<br />
La sorpresa tardó mi respuesta a su abrazo, que le devolví con retraso.Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-56295621125072592822011-02-19T00:39:00.000-08:002011-02-28T20:49:35.718-08:00Capitulo 9: LiamPor más que la busque por todos lados, Emily no está.<br />
<br />
Hoy no vino al colegio. ¿Por qué? ¿Le habrá pasado algo? ¿El padre le hizo algo?.<br />
<br />
Me rindo y trato de pasar el rato.<br />
<br />
Estamos sentados en las sillas del bar del colegio.<br />
<br />
Hace una temperatura especial. Corre una brisa hermosa.<br />
<br />
Tyler quiere salir a algún lado con todo el grupo.<br />
<br />
─Tengo sed, ¿Quién pone dinero para la bebida? ─pregunta Tyler. <br />
<br />
Generalmente, cuando tiene ese tipo de actitudes, me hace acordar a Ryan.<br />
<br />
Creo que Tyler está más que feliz con ser el nuevo "líder" (por llamarlo de algún modo).<br />
<br />
Bueno, supongo que siempre será así. Uno que siempre va a la cabeza por los demás.<br />
<br />
No es que sea malo. Pero es molesto. Por eso no me opongo, ni hago de rebelde. Yo también tengo sed.<br />
<br />
Hacemos una ronda para poner el dinero en su mano.<br />
<br />
─¿Quiéres que valla yo? ─Me ofrezco.<br />
<br />
─¡Claro! ─Me dice alegre. ─Me ahorras el trámite. ─agrega, guiñándome un ojo. Por un momento, pensé que se refería a que no tenía ganas de ir. Pero cuando me dejó el dinero en la mano, y se fue junto a una chica, creo que llamaba Claire; comprendí.<br />
<br />
─¿Vamos? Te acompaño, así no vas solito. ─Ashley, tan fiel a su trabajo: Estar siempre rondandome.<br />
<br />
Respondo con una sonrisa forzada, y me pongo en marcha.<br />
<br />
Ashley va inusualmente muy tranquila y callada. Pero la verdad es que, se esta muy bien así, por lo que ni me preocupo en empezar la charla.<br />
<br />
─¿Sabes? Hace mucho que no salgo a ningún lado, ─Oh, no. No lo hagas. No me lo pidas. ─Y veo que a ti también te hace falta un poco de aire nuevo. ¿Por qué no salimos un rato después? Es decir, nosotros dos. ─Pregunta sin rodeos, enfatizando las palabras "nosotros dos" para descartar el viaje grupal.<br />
<br />
Genial, si me lo pide.<br />
<br />
Creo que estoy empezando a odiar esa forma suya en que siempre termina presionándome a hacer algo. A lo que me refiero es que... Nunca un "Te gustaría... ", "Que te parece si... ", "Quieres... " Es obvio que me pregunta, y que puedo decir "no" perfectamente.<br />
<br />
Es sólo que... no puedo.<br />
<br />
Hay algo en ella que es bueno.<br />
<br />
Es decir, ¡Está intentando ayudarme!<br />
<br />
¿Por qué o para qué tengo que ser tan malo, o desagradecido con ella?<br />
<br />
Ya estábamos en el mostrador del bar.<br />
<br />
Me giro y le sonrío sin compromisos.<br />
<br />
─Eh..., ─murmuro.<br />
<br />
─¿Si? ¿Le ayudo en algo? ─interrumpe el señor que atiende el bar.<br />
<br />
¡Oh! ¡Que oportuno!<br />
<br />
Ashley se queda esperando una respuesta, y yo con la nueva excusa, me vuelvo al vendedor sonriendo para hacerle mi pedido. Y por si fuera poco, me adentro más en el lugar, dejándola unos minutos.<br />
<br />
¡Que actitud la mía!<br />
<br />
Me siento mal por ella, y antes de que el señor me cobre, le pido un chocolate, que pago por mi cuenta.<br />
<br />
Me reuno de vuelta con ella y levanto mi mano enfrente de la suya.<br />
<br />
─Toma. ─Ella abre la palma y ve caer el chocolate. ─Gracias por acompañarme ─Es obvio que no solo me refiero a ahora, pero no tengo la menor idea de si ella lo capta, o se da cuenta.<br />
<br />
Se le ilumina el rostro con una sonrisa y responde animada:<br />
<br />
─Si así va a ser,... Entonces te acompaño más seguido.<br />
<br />
Mmm... Ya, como si no lo hiciera todavía.<br />
<br />
No me gusta cómo sonó eso.<br />
<br />
Creo que es una tremenda metida de pata.<br />
<br />
─Vamos ─insto.<br />
<br />
Empezamos a caminar de nuevo, y es imposible ignorar el cambio de humor en Ashley.<br />
<br />
Entonces... ¿Salimos a algún lado? ─Pregunta, ahora mucho mas confiada.<br />
<br />
Se nota el contraste, su pregunta anterior estaba manchada de inseguridad, y ahora hasta podía sonar entusiasmada, segura de mi respuesta.<br />
<br />
Esto es un error.<br />
<br />
No puedo dejar que esto, o mas bien ella, avance más.<br />
<br />
─La verdad es que... Estoy sin energías para salidas. ─Miento insulsamente, pero se lo traga ─Pero... Quiero hablar contigo de algo.<br />
<br />
Para entonces, ya llegamos a la mesa en donde estaban todos.<br />
<br />
Hablamos de tonterías mientras bebemos, y luego toca el timbre que nos indica ir a clases de vuelta.<br />
<br />
Como se hace costumbre, algunos nos quedamos un rato mas sentados, hasta que Ashley me agarra para empujarme a clases, y luego cuando ya empiezo a caminar, se queda aferrada a mi brazo.<br />
<br />
En clases, intento prestar toda la atención posible, sin prestar mucho interés a los intentos de charla de Ashley, que ahora se sienta atrás mio.<br />
<br />
Asumo que es de mucha importacia, para ella sobretodo, que le tengo que informar mi desinterés hacia ella, o hacia cualquier otra. (Claro, con una excepción, pero no tiene porque saberlo)<br />
<br />
Cuando finalizan ya las clases. Recojo mis cosas, y salgo distraido por el pasillo.<br />
<br />
Cuando salgo ya del edificio, me acuerdo de mi tarea: Hablar con Ashley. Entonces detengo mi paso, y miro a mi alrededor. No la encuentro, y supongo que todavía no salió, como la mayoría, me vine muy deprisa.<br />
<br />
Me apoyo en la pared lateral del edificio, para tener mejor vista de quien sale, aunque está un tanto alejada (no mucho).<br />
<br />
Cuando la veo salir, sé que no me esperaba, porque se le escapa una sonrisa de sorpresa.<br />
<br />
Mientras se acerca, noto que se está regodeando en su propia felicidad.<br />
<br />
Me siento una miérda.<br />
<br />
─¿Me esperas para acompañarme tú a mí? ─pregunta arquenado las cejas.<br />
<br />
─De hecho, te tengo que decir algo ¿Recuerdas? ─Respondo, pero como si fuera buen perro, me levanto para obedecer. ─Te lo digo mientras vamos. ─La afirmación sonó como pregunta.<br />
<br />
─Bueno, vamos. ─Dice, elevando las comisuras mientras asiente.<br />
<br />
Caminamos un rato, para alejarnos de cualquier oyente, después de todo, no quiero que sea mas bochornoso para ambos, de lo que ya es.<br />
<br />
Ashley me toma la mano, y dice:<br />
<br />
─Entonces...<br />
<br />
Yo miro nuestras manos entrelazadas. Las levanto a la vista de ambos, y ella las observa conmigo un poco confusa, como si me preguntara si eso no era lo que yo quería.<br />
<br />
─De esto quiero hablar ─Respondo agitando su mano.<br />
<br />
Ella quiere empezar a decir algo, pero la interrumpo, porque se que va a decir todo lo contrario a lo que yo estoy tratando de soltar.<br />
<br />
─No, Ashley. Creo que... No está bien esto. ─aminoramos el paso, hasta detenernos y <span style="background-color: #274e13;">quedar de frente.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> ─No puedo... ─Empiezo sin saber muy bien qué decir. ─No puedo corresponderte. ─Digo un tanto inseguro por el término. Pero para afirmar más lo que dije, dejo caer mi mano de entre la suya.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Ashley no tiene la menor idea de cómo actuar, o su respuesta es desconsierto.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> ─Pero... ─Es lo único capaz de decir. En su cabeza le está dando mil vueltas al asunto, seguramente filtrando algo que ella hiciera mal. Que interpretara mal. ─Yo...</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> ─Puede que no sea muy tarde para... Ya sabes, mirar por otro lado. ─Comento.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Un bien para los dos: No me siento tan poqueria, y ella se busca algo más.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Ella me mira directo a los ojos, y aprieta los labios volviendo a bajar la cabeza cuando dice:</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> ─¿Ya es demasiado tarde para ti? ─pregunta certera.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> «Si, ya es demasiado tarde para mi» pero no lo voy a decir en voz alta. En cambio, levanto mi brazo pasandolo por sus hombros, lo que la voltea de nuevos hacia al frente, y froto mi mano contra su hombro en respuesta.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Empiezo a caminar de vuelta, lo que la obliga a ella también.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> ─Igual, eres buena amiga. ─Afirmo sinriendo para ya acabar con la tensión. ─¿Te gustaría ser sólo mi amiga? ¿O no lo merezco? ─Parodio, y ella sonrie al fin.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Me palmea la mano que está en su hombro y se suelta.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Cuando creo que me va a responder, me encaja un beso en la boca.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Un beso desesperadamente apasionado. Sus manos, ahora en mi nuca, me aplastan contra su rostro.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Aunque me cuesta, la separo de mi.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Sus facciones me hacen la pregunta: ¿Y? ¿Sigue siendo demasiado tarde?</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> ─Lo lamento Ashley.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Ella se resigna de una vez por todas.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> ─Está bien. Disculpa por todo esto. Mejor sigo yo sola desde acá. ─murmura.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Mientras se va, me doy cuenta de que a lo mejor fue para que no la viera llorar, o algo por el estilo.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> La entiendo, ¿Es que no es lo mismo o parecido a lo que me pasa a mi?</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Ya es demasiado tarde para mi. Intenté muy tarde que me gustara otra chica.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Emily es la que quiero.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Al otro día, todo es normal e incómodo con respecto a Ashley.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Nos saludamos, si. Estamos cerca en el mismo grupo, si. Nos dirigimos la palabra, si. Pero ahi llega todo.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Lo primero que noto es que, al tocar el timbre, ella ni me mira, sólo va a clases sola.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Y es obvio ese cambio frente a los espectadores.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Hoy Emily si vino. Y físicamente, esta bien (No sé, esperaba ver si el padre le puso la mano encima), aunque es obvio que no es la misma.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Si antes me enojé porque ella estaba en su mundo, ahora deberia estar furioso de que literalmente viva en el mundo de su mente.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Tiene la mirada fija en la nada, y en momentos frunce el seño intentando descubrir el mayor de los secretos.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"></span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Cuando los días pasan, y sigue igual, me paso de nuevo al grupo de ella. La humillante verdad es que, aunque si me preocupa Emily, es totalmente incómodo estar con Ashley. Se que cada vez que me mira, me acusa. Y de que no puedo decir nada sin que ella voltee la vista para otro lado, y solo la vuelva porque alguien la llame.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"></span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Este grupo es definitivamente más tranquilo.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Me siento cerca de Emily para ver cual es su reacción, pero ella sigue flotando.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Me estoy cuestionando seriamente mis sentimiento hacia ella.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Creo que todo empezó cuando nos conocimos, yo era íntimo amigo de Ryan, por ende yo estaba presente cuando se pusieron de novios.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Los dos grupos, el de ella y el nuestro, empezó una extraña confidencialidad.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Hasta que al final se podía decir que eramos una mezcla de "amigos". Cada uno tenia afinidad con diferentes personas del grupo, y la mia por supuesto, estaba al lado de Ryan. Eramos el cuarteto, yo, mi novia Lauren, y ellos dos.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Las cosas entre Lauren y yo no estaban muy bien, ella vivía quejándose de muchas cosas, y llegaba un momento que acababa con mi larga paciencia.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> En esos momentos Emily me aconsejaba y yo intentaba seguir sus consejos para que la relación durase. Pero Lauren renía todas para acabar. Una vez dijo que ya se había cansado de mí, y de mi estúpido carácter.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Intenté entenderla.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Muy absurdo para un adolescente, pero así fue. Intentamos una segunda oportunidad. Estaba tan enfrascado en Lauren, en que todo vaya bien, funcione, y demás, que no me di cuenta del problema de Ryan hasta que me dijo que iba a terminar con ella y se iba a ir con su familia. Al parecer su familia se mudaba de casa, y así de colegio.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Por lo que entendí, se sentía ahogado y abrumado.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> A mi me pareció mas que quiería volver para atrás y recuperar su vida anterior, por pura nostalgia.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> No sé qué tanto podría extrañar, si al principio la pasabamos de lujo. En nuestro pequeño grupo privado, todos bromeaban con todos, y podía pasarsela muy bien incluso por separado (sin Ryan, sin mi, sin Lauren).</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> No había mucha diferencia con lo que él esperaba de una buena relación. Es decir, seguia con sus amigos de siempre, no había mucho de lo que Ryan hacia le molestara a Emily tanto como para "prohibirle" seguir haciéndolo. En conclusión, Emily estaba perfecta para cualquier chico al estilo Ryan, loco por su libertad.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> En fin, cuando se fue, Emily reaccionó realmente mal. Estaba despechada (realmente, para que hasta yo lo notara) que quizo fingir que no pasó nada. Sin emabargo aunque ella quisiera fingir, yo me mostré muy buen amigo y la acompañé. Ofreciendole mi soporte. Mas que todo, porque creí que Ryan era un animal sin motivo alguno.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Yo realmente me concideraba su amigo, e intenté que se abriera, y me contara lo que realmente sentía. Pero ella obstinada se cerraba más y más, haciendose más daño.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Lauren terminó conmigo.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> No hay segundas oportunidades para que algo estropeado vuelva a funcionar como la primera vez.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Asíque Emily y yo eramos los infelices abandonados por el amor.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Ella como forma cortés me prestó soporte (sólo por ser cordial, ella sólo se hundía en su propio pozo)</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Y fue ahí cuando pasó.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Cuando mi rutina se transformó en cuidarla y extrañar lo que era. Cuando por querer comprender, me veía observandola aprendiendo nuevas expresiones en su rostro.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> En un error mio por entender, me puse en el lugar de Ryan. Me preguntaba porqué iba a extrañar algo, qué cosas negativas podía haber en ella. Y me ví a mi mismo encontrando las cosas positivas de ella.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Fue un descuido de mi parte cuando tenía la guardia baja.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Sin embargo, los dos seguimos cada uno con su vida.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Ella parecía normal, pero sin ningún signo de sentirse normal.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Y yo, también intentaba buscar una vida normal. Y pues... Por supuesto intenté volver a la vida amorosa. Pero, nunca me convencían. Flirteaba por ahi, y luego descartaba de inmediato.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Conocí a Ashley, y ella me gustaba. Empezamos ese jueguito, al cual yo jugaba a medias, y así hasta que me rendí .</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Yo quería estar con Emily.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Dejé todo, y me concentré en ella. Después de todo, no tenía elección. Es decir, mirando otras chicas, no funcionaba. Y si Emily me rechazaba, ya estaba.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> Digamos en una palabra, estaba regalado con moño y todo.</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"><br />
</span><br />
<span style="background-color: #274e13;"> </span><br />
<span style="background-color: black;"><br />
</span><br />
<br />
<br />
A la salida de clases la busqué, y noera de extrañarse encontrarla en su árbol de atrás de la escuela.<br />
<br />
Era como su santuario.<br />
<br />
Me senté a su lado sin llamar mucho la atención. Estaba dispuesto a esperar, después de todo, en algún momento ella tendría que reaccionar y darse cuenta de que tiene que volver a casa.<br />
<br />
Ella ni se permuto al sentarme cerca.<br />
<br />
Me distraí pensando en las musarañas. Y me pregunté ¿Qué estoy esperando? ¿Para qué espero que me preste atención?<br />
<br />
Entonces ya sé porqué.<br />
<br />
Era jugar a todo o nada.<br />
<br />
No creo que lo sepa de todos modos, ella no es tan esquiva como para andar por el lado mío sin siquiera decir algo. Sería egoísta, y ella no lo es.<br />
<br />
Es estúpido seguir así.<br />
<br />
Definitivamente es hora de actuar, en vez de mirar.<br />
<br />
Como si fuera el destino que me respone, siento unos brazos alrededor de mí. Y no me puedo creer lo que estoy viendo.<br />
<br />
Emily me está abrazando.<br />
<br />
¿Se supone... ?<br />
<br />
¡Oh! ¡Ya! ¡No seas tan tonto! (Es difícil cambiar la forma de actuar con ella, pero lo hago).<br />
<br />
Estiro mis brazos y la abrazo también. No como amigo, sino como yo quiero.<br />
<br />
─No sabia que ya volví a ser la de antes ─comenta antes de respirar más rápido.<br />
<br />
Después de un rato se separa, y yo para que no se aleje. La atraigo hacia mí, y me acomodo para que ella se quede así. A mi lado.<br />
<br />
─No, de hecho pareces peor ─Se me escapa, y frunzo el ceño. ─Por eso volvi. Pero parece que ni te diste cuenta. ─Digo con recelo.<br />
<br />
Ella asimila las palabras, y sé que se va incómodar, porque... ¿Qué derecho tengo? ¡NINGUNO! Soy su amigo, si. Pero no es suficiente. Al menos no para mí.<br />
<br />
Miro de reojo y la veo pensando, más bien, debatiendo algo. Al final suelta como atragantada, como si lo quisiera decir desde antes.<br />
<br />
─Ryan volvió. Es decir, lo encontré en una plaza y me pidió que volviera con él. <br />
<br />
Además de que todos mis organos caen al piso, siento tanto odio. Quiero decir «¡¿Qué?!» El muy desgraciado la deja tiraba a la deriva, y ahora ¿Quiere volver?.<br />
<br />
Estoy desquiciado. Y eso me pone enfermo, porque odio esas olas de emociones que me hacen parecer psicópata. Asique... simplemente me callo.<br />
<br />
Es entonces que ella dice:<br />
<br />
─Ya sé, no te preocupes. Le dije que no podía volver con él, y me respondió que entró al servicio militar. <br />
<br />
¿Qué tiene que ver una cosa con la otra? ¿Intenta dar lástima?<br />
<br />
─¿Y? ─Pregunto molesto.<br />
<br />
─Pues, que no puedo dejarlo así como así. Un tipo al cual yo consideré como un padre cuando era mas chica, entro en eso y… lo ultimo que supe de él, fue que todas sus cosas quedaron a cargo de su hermana ─Me explica en resumen ─Y bueno… eso me ha atormentado estos días. ─Termina.<br />
<br />
Si, ¡Claro! Quiere dar lástima. Juega sucio el maldito.<br />
<br />
─Te aterroriza que no vuelva, y peor aun, que le hayas rechazado antes. ─Ahora entiendo por dónde viene la mano. La verdad me tiemblan los labios por querer decir algo. ─¡Él terminó contigo! ¡No le debes nada! ─En puro impulso lo largué. Como si le explotara en la cara.<br />
<br />
Estoy nervioso, no quiero tratarla mal. Pero... ¡Dios! ¡Va a seguir creyendo en él! ¿Cómo puedo mantener el auto-control si ella sigue pensando en él. Y yo cayendome a pedacitos. Es que... Emily nunca me va a ver más que como su amigo. Y es tan frustante.<br />
<br />
Ella se levanta y se separa de mi. «Genial, ¿Por qué simplemente no soplas hacia mi para terminar de desmoronarme? Es más fácil que cualquier cosa que pienses.» Digo para mis adentros sarcásticamente.<br />
<br />
─Ya sé, y es por eso que intento convencerme a mi misma de que ya no vale la pena. ─Dice con tristeza.<br />
<br />
Ella sólo está intentando olvidarlo. No estoy siendo justo. Soy impulsivo. Me dan ganas de abrazarla tan fuerte que hasta podría romperla, como una muñeca. De repente siento un entusiasmo, por querer cuidarla, y por intentar ayudarla.<br />
<br />
─Tú no lo dejas salir. ─Digo, y para explicarme mejor señalo su cabeza. ─Necesitas distraerte, no encerrarte sola. ─Señalo con dulzura. Y se puede decir que todo el clima lo hace necesario. Asíque me acerco y pienso en decirle. Pero su cercanía me propone otra cosa. Me acuerdo de Ashley, y de su beso. Y ahora entiendo: La desesperación. ─Necesitas… saber. ─Digo casi inaudible frente a su rostro.<br />
<br />
Como si el coraje estuviera en una caja, lo saco y lo dejo fluir por mi cuerpo.<br />
<br />
Sin miedo ahora, pongo mis manos a cada lado de su cara, y presiono mis labios contra los suyos.<br />
<br />
No es menos de lo que esperaba que sería.<br />
<br />
Además pensé que ella me rechazaría, y no lo ha hecho.<br />
<br />
Tan fácil como vino, así de facil se me va el coraje. Y me aparto obligandome a mantaner mi rostro cerca. Si, seguía esperando un rechazo. O algo parecido. Pero ella solo gesticula:<br />
<br />
─No entiendo... <br />
<br />
¿No es obvio?<br />
<br />
─Creo que es lo mas obvio del mundo Emily. ─Respondo con sarcasmo, pero ella sigue confundida. ¿A qué espera? ─Em… todo el mundo sabe que… voy a seguir atrás tuyo aunque sigas enamorada de mi antiguo mejor amigo. ─Busqué las palabras minuciosamente, sin embargo siguen avergonzandome decirlas en voz alta. <br />
<br />
Ella sigue con su cara de confusión. Y me viene una sensación de inseguridad arrolladora. ¿Se está burlando de mí? Estudio sus facciones. Ella no es de esas. Pero, ¿Por qué tanta confusión? Para todo el colegio era obvio que yo estaba literalmente "babeando" por ella. ¿Por qué ahora me enoja que ella no lo vea?<br />
<br />
Miro sus ojos, que están tan cerca de mi. Ella está pensando. Y de repente, noto el color en sus mejillas. Que adorable. <br />
<br />
─Pero… Ashley. Si, ¿ustedes no… ? ─Intenta zafarse. Que frustración. <br />
<br />
─No. Además, ya me cansé de intentar. ─Respondo con sinceridad, alejandome, dandole espacio. <br />
<br />
─¿Intentar el qué? <br />
<br />
─Esta cosa de… prueba y fallo. ─Respondo incomodo. ─ya he salido con suficientes chicas como para ser inteligente y darme cuenta que con la única que quiero salir, es contigo. ─Ya está. Me cansé de tanto suspenso.<br />
<br />
─Liam… ─Hace una pequeña pausa buscando las palabras. ─Esto… No lo había pensado antes.<br />
<br />
─Claro que no. ─Digo para mí, más que para ella.<br />
<br />
─Liam… Yo te quiero. No lo puedo negar. Es decir ¿Cómo? Si siempre has estado ahí, para mi. Cuando te necesité, solo miraba a mi lado, y te veía. ─Ahora estaba nerviosa, y confiesa: ─y… siento mucho que hayas pasado por eso. Creo… Creo que, si hubieras estado antes, ya sabes, me hubieras dicho esto antes de ver a Ryan, creo que… yo… creo que hubiera podido… estar contigo ahora.<br />
<br />
Siento como si me dieran una cajita de regalo, y cuando la abro, alguien salta desde dentro gritando ¡Sorpresa!<br />
<br />
Esas palabras no pueden entrar en mi cabeza. Y hay algo en todo esto, que me molesta. Y no me es difícil detectar qué es.<br />
<br />
Siempre después de Ryan.<br />
<br />
Ya no me importa. <br />
<br />
─No es lo que esperaba. ─Digo con íronia, y sonrío<br />
<br />
─¿Qué cosa? <br />
<br />
─No son las palabras que exactamente esperaba escuchar, y sin embargo podría haberme tirado de donde quieras por escucharlas. Pero, no me satisfacen, porque sigues pensando, o queriendo compararme con él. ─No puedo evitar decir la verdad.<br />
<br />
Le pasa por el rostro el reconocimiento y puedo estar seguro de que tengo razón.<br />
<br />
Ella se lo piensa un rato, y responde:<br />
<br />
─Te quiero, independientemente de cualquier cosa que tenga que ver con Ryan. ─Me eleva las esperanzas, sé que lo que dice es cierto. Y se tomó el trabajo de que al momento de decirlo sea verdad. <br />
<br />
Traducido: Me quiere.<br />
<br />
Lo que es igual a: Tengo esperanzas.Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-48240904248816391732011-02-18T23:09:00.000-08:002011-02-18T23:09:10.595-08:00Capitulo 9: Emily<span lang="ES-AR"> <div align="justify">Las semanas pasaban, y yo entraba y salía, a lapsos indefinidos, de sueños a la realidad.</div><div align="justify">En momentos estaba en clases, y en otros imaginaba toda la situación con Ryan, es decir, perdonándolo y volviendo con el. O todo tipo de variables con respecto a mi relación con él.</div><div align="justify">Necesitaba estar cien por ciento segura de que estaba bien, y de que Ryan es parte del pasado. Pero ¿Cómo? Si estaba tan preocupada por él, porque le pasara algo en esta “nueva profesión”.</div><div align="justify">Sabia que lo correcto era dejarlo pasar, y guardarlo en un cajón en mi mente, sin embargo otros recuerdos afloraban.</div><div align="justify">El recuerdo de perdida de alguien por el maldito servicio militar. Nunca pensé que iba a pasar por lo mismo, se suponía que no iba a pasar más. Pero acá estaba, con un ex novio que no se si deje de amarlo y se esta metiendo en es pesadilla.</div><div align="justify">Mis ensoñaciones eran muy frecuentes, porque dentro de mi estaba el aturdimiento de no querer dejar a Ryan ir a ese lugar, no quería perderlo, y por otro lado, el de dejarlo ir, no solo físicamente sino también mental y sentimentalmente</div><div align="justify">En otros momentos estoy tan enferma y cansada de pensar en ello que vuelvo a la realidad desesperadamente para quedarme ahí.</div><div align="justify">Soy vagamente consciente de todo.</div><div align="justify">-Emily, ¿Qué tienes? ¿Qué traes? -me preguntaba mi mejor amiga Helen. A lo cual, yo respondía:<br />
-Nada -casi monótona.<br />
Aunque era mi mejor amiga, no le había contado sobre Ryan. Claro que sabia sobre nuestro noviazgo y sobre que el termino conmigo, por supuesto, es lo que sabe el colegio entero. Pero nada mas.<br />
No pude contárselo porque lo jure, porque así tenia que ser, y así fue.<br />
En unas de esas salidas a la realidad, me encontré sentada en el mismo árbol de siempre, era fuera de clases, lo sabia porque Liam estaba sentado a mi lado (él, a menos que no sea una emergencia, no perdería sus clases por mi).<br />
Como antes, siempre a mi lado.<br />
Me sorprendió. No me acuerdo de que me halla perdonado, mucho menos ahora que estaba ida del todo.<br />
Ahora que lo pienso, ¿no es esto una emergencia? ¿faltó a clases?<br />
Me doy cuenta de que no, porque a lo lejos puedo ver otros chicos, además no esta haciendo nada, solo me acompaña.<br />
Si fuera emergencia… haría algo, ¿no?<br />
Me alegra mucho de que vuelva conmigo. El sigue mirando al frente sin hacer caso a mi observación. Asíque me acerco lentamente y lo abrazo.<br />
Lo siento titubear, pero al fin me lo devuelve muy firme.<br />
-No sabia que ya volví a ser la de antes -repuse contra su pecho. Al decir aquello me dio miedo de que vuelva todo ese alejamiento y alargué más el tiempo del abrazo.</div></span><span lang="EN"><div align="justify">En fin, me separo para darle espacio.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Porque estoy segura que no se esperaba esa reacción de mi.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Pero el me apoya a su costado contra el tronco del árbol.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Me agrada, creo que pasaron siglos sin el. Liam, el único que siempre estuvo ahí para mi.</div><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">No, de hecho pareces peor. Por eso, volví. Y parece que ni te diste cuenta. -¿siempre fue tan directo? La primera parte de su frase suena con dolor, pero la segunda se le agrega… ¿frustración?.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Pobre Liam, debe estar arto de mi.</div><div align="justify"></div><div align="justify">De todas formas, yo misma lo estoy.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Debe de pensar en alguna madera de romper esta amistad para librarse de mi, de una vez por todas.</div><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-Ryan volvió. Es decir, lo encontré en una plaza y me pidió que volviera con él. -le solté.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Si hay alguien que merece que le cuente todo lo que verdaderamente siento, esa persona sin dudarlo, es Liam.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Aunque nunca había sido tan abierta con él, me siento bien.</div><div align="justify"></div><div align="justify">No parece lo mismo por parte de Liam, que cambia su semblante para reemplazarlo por rabia.</div><div align="justify"></div><div align="justify">-Ya sé, no te preocupes. -Le prevengo. -Le dije que no podía volver con él, y me respondió que entró al servicio militar.</div><div align="justify"></div><div align="justify">-¿Y?</div><div align="justify"></div><div align="justify">-Pues, que no puedo dejarlo así como así. Un tipo al cual yo consideré como un padre cuando era mas chica, entro en eso y… lo ultimo que supe de él, fue que todas sus cosas quedaron a cargo de su hermana. -le cuento porque él no lo sabe. Aunque si que sabe de que mi papá es un desgraciado, asíque lo comprende. -y bueno… eso me ha atormentado estos días. -Concluyo.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-Te aterroriza que no vuelva, y peor aun, que le hayas rechazado antes. -Afirma muy seguro, y también muy resignado. -¡Él terminó contigo! ¡No le debes nada! -Exclama mirando al cielo.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Yo a su lado, noto perfectamente la tensión de su cuerpo, también noto que esa posición ya es incomoda.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Me enderezo alejándome unos centímetros de él.</div><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-Ya sé, y es por eso que intento convencerme a mi misma de que ya no vale la pena. -en mi voz se desliza un sentimiento de tristeza, lo que hace que parezca que de verdad lo intento.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Liam también se endereza, y quedamos frente a frente.</div><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-tú no lo dejas salir -responde.</div></span><span lang="EN"> Señalando mi cabeza, pero sin tocarla. </span><span lang="ES-AR">-Necesitas distraerte, no encerrarte sola. -dice poniendo los ojos en blanco -necesitas… -se acerca mas hacia mi, para hacer alguna seña con sus manos o algo, como lo de mi cabeza. O eso creía. -Necesitas… saber. -susurra.</span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Y con determinación, pone sus manos a cada lado de mi rostro, y me besa.</div><div align="justify">No me resisto, porque mi cuerpo se desconecto de mi cabeza.</div><div align="justify"></div><div align="justify">No encuentro donde están mis manos, o alguna extremidad.</div><div align="justify"></div><div align="justify">La cabeza da muchas vueltas, y me mareo al instante.</div><div align="justify"></div><div align="justify">No comprendo, ¿Qué se supone que tengo que saber?</div><div align="justify"></div><div align="justify">¿Qué hay otros chicos, u otra gente en quien pensar?</div><div align="justify"></div><div align="justify">Liam se separa unos escasos centímetros para ver mi expresión.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Lo miro confusa y admito:</div><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-No entiendo… -digo entrecortadamente, aunque agradezco tener voz para decirlo.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-Creo que es lo mas obvio del mundo Emily -decia, pero yo todavía seguía sin entender.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Además, estaba mas consciente de que no se alejaba ni medio milímetro.</div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify"></div><div align="justify">-Em… todo el mundo sabe que… voy a seguir atrás tuyo aunque sigas enamorada de mi antiguo mejor amigo. -confiesa, avergonzado.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Liam no estaba conmigo por amistad, ¡¿él esperaba algo más de mi?! ¿es que de verdad no le importa? ¿no le importa que sea tan estúpida, lenta, despistada, melancólica y desesperada?</div><div align="justify"></div><div align="justify">Me hace sentir rara, porque yo estaba tan embobada con Ryan que no había reparado en nadie más.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Me quedo con este pensamiento, porque parece decir mas de lo que parece.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Parece decir mas de mi… mas de lo que me gustaría…</div><div align="justify"></div><div align="justify">Mi vida giraba en torno a Ryan, ya fuera porque estaba con él, o cuando me dejó, o cuando esperé a que iba a volver, cuando quise olvidarlo, cuando intenté avanzar ya de una vez, cuando vuelve, y ahora, cuando deseo que la elección que tome es la correcta.</div><div align="justify"></div><div align="justify">¡siempre es sobre él!</div><div align="justify"></div><div align="justify">Esta verdad me sorprende y me siento estúpida, de haber perdido todo en él. </div><div align="justify"></div><div align="justify">Me sentía ultrajada.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Como si me hubieran metido un chip en la cabeza con esa única función:</div><div align="justify"></div><div align="justify">Ryan.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Siento como si hubiera descubierto el final de un laberinto.</div><div align="justify"></div><div align="justify">La cabeza se me despeja.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Vuelvo en si, pasaron solo unos segundos.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Liam, sigue esperando una respuesta. A lo mejor tomó mi espera como que estaba pensando en él, pero no. Otra vez, estaba pensando en Ryan.</div><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-pero… Ashley. Si, ¿ustedes no… ? -digo muy lucida (bueno… con respecto hace un minuto).</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-No. Además, ya me cansé de intentar. -Dice, ahora si se aleja para ponerse en mejor pose.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Aunque no me di cuenta, él se me había “declarado”.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Supongo que insinuar que esté con otra, no es una muy buena respuesta para alguien que (en otras palabras) dice “me gustas”.</div><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-¿intentar el qué? -pregunto con interés, pero a la vez para ganar tiempo.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Necesito pensar en esto que me dice Liam, además de muchísimas cosas mas, a las cuales pase por alto por culpa de Ryan.</div><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-Esta cosa de… prueba y fallo. -responde incomodo. -ya he salido con suficientes chicas como para ser inteligente y darme cuenta que con la única que quiero salir, es contigo.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Ahora, en la forma en como lo dice, caigo de una vez por todas, en la cuenta de lo que me dice. Y poco más, la mandíbula no me queda colgando frente a él.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Si, es obvio que no le importa nada, esta ciego.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Por suerte, consigo un poco de autocontrol, y resisto las ganas de abrir la boca como en las películas.</div><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-Liam… -«no sabes lo que dices» estoy por decir, pero si lo sabe. Algo en él me lo dice. Parece haberlo premeditado desde dios sabe cuándo. -esto… No lo había pensado antes.</div><div align="justify"></div><div align="justify">-Claro que no -responde por lo bajo.</div><div align="justify"></div><div align="justify">-Liam… -intento de nuevo -yo te quiero. No lo puedo negar. Es decir ¿Cómo? Si siempre has estado ahí, para mi. -creo que voy por buen camino. -cuando te necesité, solo miraba a mi lado, y te veía. -empiezo a mirar la hierba que hay bajo mis manos, porque no puedo mirarlo a los ojos. Simplemente me marea. -y… siento mucho que hayas pasado por eso. Creo… -estoy llenando vacíos. A lo mejor lo que voy a decir no sea cierto. -creo que, si hubieras estado antes, ya sabes, me hubieras dicho esto antes de ver a Ryan, creo que… yo… creo que hubiera podido… estar contigo ahora. - la voz en las ultimas palabras fueron apenas audibles, pero firmes. Lo cual me extraña.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Siento un calor que me hierve las orejas. Pero lo que las quema, es su mirada. Se que me está calvando con la mirada, aunque en este momento este viendo mis manos, que compulsivamente pellizcan la hierba.</div><div align="justify"></div><div align="justify">«puede que si»</div><div align="justify"></div><div align="justify">Puede que sea cierto lo que dije.</div><div align="justify"></div><div align="justify">En realidad, Liam no está nada mal. De hecho, es perfecto. Por lo menos lo que necesito.</div><div align="justify">El silencio me está matando.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Levanto la mirada y me encuentro con la suya.</div><div align="justify"></div><div align="justify">¿Cuántas veces he mirado directamente a esos ojos mar profundo, desde que rompí con Ryan?</div><div align="justify"></div><div align="justify">Por lo menos en lo que soy consciente, solo dos veces:</div><div align="justify"></div><div align="justify">Cuando me acompaño a casa después de llorar, y ahora.</div><div align="justify"></div><div align="justify">-No es lo que esperaba. -dice haciendo aparecer una sonrisa.</div><div align="justify">-¿Qué cosa? -Pregunto.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-No son las palabras que exactamente esperaba escuchar, y sin embargo podría haberme tirado de donde quieras por escucharlas. Pero, no me satisfacen, porque sigues pensando, o queriendo compararme con él. -confiesa.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Tiene razón.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Aunque quiero remendarlo. Quiero decirle la verdad, aunque no puedo sin decir algo que le de la razón.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Me pone triste. Su tristeza, me pone mal.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Porque no puedo darle lo que quiere.</div><div align="justify"></div></span><span lang="ES-AR"><div align="justify">-te quiero, independientemente de cualquier cosa que tenga que ver con Ryan. -eso está bien. Por lo menos hizo que sonriera francamente.</div></span><span lang="EN"><div align="justify"></div><div align="justify">Separa los brazos, y los extiende hacia mi en forma de pregunta.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Me acerco a ellos sin dudar.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Recuesto mi cabeza en su pecho, y mis dedos se cierran en su espalda.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Quiero el bien para Liam. Robaría por él, para darle lo que quiera.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Es una deuda que no puedo pagar, a menos que le ocurra lo mismo que a mi. Lo peor de todo es que, yo le estoy haciendo algo similar.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Me siento en deuda.</div><div align="justify"></div><div align="justify">Si, voy hacer lo que sea necesario para recompensarlo.</div></span>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-42704999220310214082011-01-18T22:03:00.001-08:002011-02-17T18:53:43.374-08:00Capitulo 8<div style="text-align: justify;"><span lang="EN"><span lang="EN">Me pierdo mirando esos ojos que me hacen perder la concentración.</span></span></div><div style="text-align: justify;"><span lang="EN"><span lang="ES-AR"> </span></span><br />
<span lang="EN"><span lang="ES-AR"> «Egoísta»</span></span><br />
<span lang="EN"><span lang="ES-AR"> </span></span><br />
─<span lang="EN"><span lang="ES-AR">No puedo, no puedo con esto. No me perdonaría nunca si… </span></span>─<span lang="EN"><span lang="ES-AR">estaba a punto de decir “volviera contigo” pero es mucho mas que eso. Es el simple hecho de volver a darle permiso para que vuelva a destruir lo poco que queda de mi.</span></span> ─<span lang="EN"><span lang="ES-AR">…vuelvo a cometer el mismo error. </span></span><br />
<br />
<span lang="EN"><span lang="ES-AR"> Es tonto sentirme tan mal diciendo lo que estoy diciendo, porque después de todo, es lo que suponía debía esperarse de mi.</span></span><br />
<span lang="EN"><span lang="ES-AR"><br />
Sin embargo, me siento mal porque le creo. Le creo que se haya arrepentido, y le creo cuando sus ojos me dicen que les gustaría estar de nuevo conmigo.<br />
<br />
Estaba por refutar mi idea cuando lo interrumpo:<br />
<br />
─<span lang="EN"><span lang="ES-AR">Te esperé. Hasta que me di cuenta de que no ibas a volver, y todo fue peor. </span></span>─<span lang="EN"><span lang="ES-AR">Los recuerdos empiezan a salpicar mi mente. </span></span>─<span lang="EN"><span lang="ES-AR">Las cosas no eran las mismas, todo parecía con menos color, mas frío, agotador… </span></span>─<span lang="EN"><span lang="ES-AR">La lista se extendía mas, pero no quería entrar en detalles. </span></span>─<span lang="EN"><span lang="ES-AR">Me prometiste,… tú… se suponía que me ibas a alejar de mi casa, que todo iba a ir a mejor. No ibas a permitir que mi padre volviera a herirme. </span></span>─<span lang="EN"><span lang="ES-AR">Callé abruptamente una centésima de segundo antes que mi voz se quebrara. </span></span><br />
<span lang="EN"><span lang="ES-AR"> </span></span><br />
<span lang="EN"><span lang="ES-AR"> Noto que sus manos presionan con mas fuerza las mías, lo que se traduce a “ lo siento, también por eso"</span><span lang="EN">.</span></span></span></span></div><div style="text-align: justify;"><br />
<span lang="EN"><span lang="ES-AR"> «¿sabes qué es lo peor? Que quería decir cosas mucho mas hirientes, que te duelan tanto como a mi. Pero me limito a esto. Porque me siento egoísta. Y porque no producen mas que dolor al ver tu rostro cuando pronuncio cada palabra.» Digo para mis adentros.</span></span></div><div style="text-align: justify;"><br />
<span lang="EN"><span lang="EN"> Es horrible, pensé que me sentiría radiante.</span></span><br />
<br />
─<span lang="EN"><span lang="EN">Olvídalo, no queda mas remedio. </span></span>─<span lang="EN"><span lang="EN">Replico, frustrada conmigo misma.</span></span><br />
<br />
─<span lang="EN"><span lang="EN">Emily, no podía…- dice en tono lastimero. </span></span>─<span lang="EN"><span lang="EN">He entrado al servicio militar.</span></span></div><div style="text-align: justify;"><span lang="EN"><span lang="EN"></span></span><br />
<div style="text-align: justify;"><br />
***<br />
<br />
Estoy en mi cama, observando las motas de polvo que revolotean a los rayos de luz del sol que entra por la ventana.<br />
<br />
Intento seguir una de entre todas, pero solo lo consigo por unos segundos, ya que luego desaparece.<br />
<br />
Luego me doy cuenta que no hay mas, se han acabado. Y es porque ya no hay luz del sol que las ilumine, puesto que ya es de noche.<br />
<br />
Me levanto de la cama, y me estiro. La columna y parte del cuello me duelen. ¿Cuánto tiempo he estado acostada?<br />
<br />
Soy vagamente consciente de haber arrastrado los pies hacia mi cama.<br />
<br />
Salgo de mi habitación y parece haber personas, lo noto por el ruido del tele en la habitación contigua y por las luces encendidas.<br />
<br />
Voy hasta la cocina y cuando estoy cruzando las puerta, casi me choco con mi mamá.<br />
<br />
─Hola ─No puedo evitar el tono de sorpresa.<br />
<br />
─Hoy no fuiste a clases ─Me reprocha. ─¿Por qué? <br />
<br />
─Hoy… me dolía la cabeza un montón ─Miento, pero es inútil, porque ella ya lo sabe. Me ha cubierto siempre que ha podido. ─Era un martilleo constante. ─prosigo al darme cuenta que la mentira dio lástima.<br />
Debo aprender a mentirle mejor a mamá.<br />
<br />
─Mmm… ¿tomaste algo? ─pregunta siguiéndome el juego, estoy completamente segura de que papá es el de la tele, y que está escuchando.<br />
<br />
─Necesitaba aire; pero si, he tomado algo antes. ─Digo para “calmarla”. O… en otras palabras, seguir con el juego.<br />
<br />
Oigo el crujido del sofá.<br />
<br />
Se está acomodando.<br />
<br />
Me ha creído.<br />
<br />
La complicidad con mi mamá, llega hasta cierto punto. <br />
<br />
No le cuento mas que lo justo y necesario. Y, por suerte, ella me entiende.<br />
<br />
La noche fue tranquila, después de todo, mi papá solo me ha hervido la sangre sin llegar a explotar. <br />
<br />
Me doy un baño extremadamente largo, porque mi idea era sacudirme todo lo que ha pasado ese día, pero por supuesto, no sirvió de nada.<br />
<br />
Las preguntas me golpean como bofetadas mas fuertes que las que me ha propinado mi propio padre.<br />
¿Qué siento por él?, ¿Qué voy a hacer?, ¿Lo volveré a ver?.</div></div>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-15698658604828326862011-01-10T07:35:00.003-08:002011-02-17T19:07:30.197-08:00Capitulo 7<div style="text-align: justify;"><span lang="ES-AR">Me siento como si fuera yo misma de vuelta. Como si volviera el tiempo atrás, esos momentos en los que yo creí que eran felices, cuando tenia esperanza y fe en que todo cambiaria para bien, ¡por fin!. Después de tanto tiempo, después de tanto sufrimiento, pensé que me había tocado el turno de ser feliz. Pensé que la vida no tendría porqué ser tan injusta, y que todos tenían al final un poco de equidad en la vida. </span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Ya no me duele pensar en ello; de hecho, no se si es puro masoquismo pero, me gusta pensar que soy lo suficientemente fuerte para soportarlo.</span><span lang="ES-AR"><br />
</span><span lang="ES-AR"> Es por ello que sonrío de oreja a oreja. Porque me he dado cuenta de ello.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Soy dueña de mi misma, ¡me siento bien!</span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR">¿sabes? Yo tampoco me olvidé de ti. </span>─<span lang="ES-AR">digo; pero cuando pronuncio mis palabras, no puedo evitar que se me escape naturalmente una mueca que afecta mi sonrisa.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> No me doy cuenta de lo que estoy haciendo, me he engañado a mi misma. </span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Estoy montando todo un teatro para vengarme de él.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Es más, estoy actuando como una estúpida.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Me pongo seria, y luego sonrío como loca.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> ¿quiere decir otra razón mas para la lista?¿encima de que éste chico me halla roto el corazón, también me hace perder el juicio?</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Mis pensamientos no son coherentes, estoy confundida.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> La certeza de hace unos segundos se esfumó tan rápido como llegó.</span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR">Eso quiere decir que existe una posibilidad de que… </span>─<span lang="ES-AR">responde Ryan como quien no quiere la cosa.</span><br />
<span lang="ES-AR"> No, no quería decir eso. Quería refregarle en la cara todo.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Pero… mi cabeza es un colador.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Tic, Tac. Los minutos pasan.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Creo que me quedé congelada con la sola idea de que él vuelva a ser parte de mi vida. O mas bien de no estar el 100% segura de querer decir no.</span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR">De que… </span>─<span lang="ES-AR">prosigue Ryan, seguramente por no parecer un tonto. La conversación acabó ahí mismo, en cuanto dejó su insinuación en el aire. </span>─<span lang="ES-AR">…¿no me odies?. </span></div><div style="text-align: justify;"><br />
<span lang="ES-AR"> « ¡¿Qué?! » pienso para mis adentros.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Mi cara se empieza a transformar en la pura incredulidad en persona.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> ¿Es eso lo que quería decir? O… yo interpreté las cosas erróneamente.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> ¡Oh! Caigo en la cuenta de que ese es él. De que cuando dice algo o hace algo que me deja fuera de lugar, lo compensa con algo estúpido o bromas; o en este caso, algo de una carga mucho mas ligera.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Tengo que admitir que me siento mucho mejor, porque esa si es una pregunta que puedo contestar.</span><span lang="EN">No lo odio, por lo menos no ahora. Es decir, si estuve muy… pero… ¡Oh, Dios! ¡¿Qué me pasa?!</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> No puedo seguir con esto, supongo que estoy entrando en shock, puesto que no lo hice en cuanto lo vi.<br />
A lo mejor fueron sus palabras, que me dispararon el pulso hasta poderlo sentir por todos lados.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Me rindo.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Estoy en transe y no voy a poder contestar nada de lo que él diga ahora, pero ¿Qué hago? ¿Me voy sin mas? ¿Le explico cualquier mentira? O… ¿Le digo todo?.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Pienso en esta ultima pregunta, y siento que me invade una rabia instantánea.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> El recuerdo no tarda en llegar.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> No me molesto en detenerlo, de hecho me separo de él, que estaba parado frente mi observando todo.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Me siento en un banco, uno diferente con un árbol detrás que me podía servir de respaldo. Si lo hubiera visto antes, cuando llegué, lo hubiera elegido.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Me siento y apoyo mi cabeza en árbol. No hace falta mirar para saber que Ryan ya estaba sentado al lado mío.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> No me molesta en absoluto, me da tiempo de procesarlo todo.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Pienso en el día que fui al parque, con la esperanza de sacar todo de dentro mío. Como una fruta, cuando se pone en mal estado, se pudre sin pedir permiso. Y lleva consigo a las demás que la rodean. Todas se empiezan a pudrir.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Eso es lo que tenia que evitar, pudrirme todo por dentro.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Cuando terminé de gritar; me sentí mejor, no del todo pero mejor. Comprendo que, lo que necesitaba, lo que en verdad me haría sentir bien completamente, es habérselo dicho a él y no al aire.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Desde aquel día en que Ryan decidió que ya no tendríamos que estar mas juntos, yo lo acepté; lo acepté porque no me quedaba otra, porque creía que era tonto e inútil siquiera suplicar.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> En definitiva, era de débiles.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Yo no quería ser débil, lo que me llevó a callar.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Nunca le dije a nadie lo mucho que dolió sentir que no era lo suficiente, que no estaba a la altura. Nunca pregunté mas nada, simplemente hice como si nada malo hubiera pasado. Yo sabia que era malo, pero no me di cuenta de ello hasta que llegué a casa y me topé con mi padre.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">No quise decir eso, </span>─<span lang="EN">comienzo titubeante haciendo referencia a su insinuación, de todos modos ya sabe a lo que me refiero. </span>─<span lang="EN">y… no puedes esperar a que esté lucida y perfecta después de haber desaparecido y hacerte aparecer, así, como si nada, bombardeándome con preguntas esperando que te las conteste. </span>─<span lang="EN">es mejor ser honesta. Después de todo voy a terminar mi rehabilitación.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Voy echarle todo en cara, lo acabo de decidir.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Echo un vistazo a su expresión, y se da cuenta que yo no voy a ir por su jueguito. Y todo rastro de felicidad y broma desaparece.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Es obvio que se dio cuenta que no respondí no a la pregunta de si le odiaba.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Es extraño.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Puedo ver pasar todo por sus ojos, sin embargo su expresión sigue intacta: cauta.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">No te odio. </span>─<span lang="EN">le digo para tranquilizarlo, y funciona.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">Tú no entiendes. </span>─<span lang="EN">responde después de varios minutos pensándoselo.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Levanto una ceja involuntariamente. Ahora lo que no entiendo es su respuesta.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">Si, y seguro que tú si lo comprendes todo. </span>─<span lang="EN">digo exasperada, lo que me sorprende porque pensé que ya me había calmado. </span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Insolente, se me viene a la mente.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> El me bota como pañuelo descartable, ¿y yo no entiendo?, ¿Qué derecho tiene para reprochar algo, cuando él mismo me dejó?</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Lo miro a los ojos esperando una respuesta. Por lo que se levanta y se arrodilla ante mi tomándome las manos.</span><span lang="EN"></span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> </span><span lang="EN">Me incomoda porque no estaba preparada, y porque no quiero su contacto.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Intento deshacerme de las de él. Pero las aprieta con obstinación.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">¡Lo lamento!, ¿si? Lo lamento. Soy idiota, ya lo sabes. </span>─<span lang="EN">estaba suplicando, no me lo puedo creer.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Volvió a desequilibrarme. Había cambiado mucho, no solo físicamente.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Ryan nunca, pero nunca me hubiera suplicado antes. Hubiera usado otra táctica conmigo pero nunca una suplica.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> No respondí porque no quiero hacer lo mismo que hace un rato.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Definitivamente eran sus palabras las que me desacomodaban.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> No podía ignorar que estaba arrepentido, no se si de haberme dejado, pero si de haberme hecho sufrir.</span><br />
<span lang="EN"> </span><br />
<span lang="EN"> Bueno, ¿Qué más da? Le voy a dar mi discurso.</span></div>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-81119308549257684202010-12-11T16:32:00.003-08:002011-02-17T19:17:00.208-08:00Capitulo 6<div style="border-bottom: 3pt dotted; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none; padding-bottom: 1pt; padding-left: 0cm; padding-right: 0cm; padding-top: 0cm; text-align: justify;">Me bajé en un lugar muy bonito, casas bien arregladas, y limpio. Sobre todo limpio. Había gente rondando por ahí, toda la composición daba una sensación de tranquilidad.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Me bajé justo en frente de una plaza, porque ni modo que me bajara en un barrio donde no hubiera nada.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Crucé la calle y me senté en un banco bajo un árbol grandísimo.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
No tenía mucho que hacer, por lo que me acomodé y me puse a observar a la gente, las casas, el lugar.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Había una pequeña que me llamó la atención. Era muy bonita por cierto, vestía una camisita de flores y una falda mini de color negra. Me gustó su cabello, largo, castaño y lacio. </div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Me dio envidia.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Ella danzaba alrededor de su madre, sonreía y corría hacia los juegos -que no eran muchos, solo unas hamacas, y toboganes-. Aunque para los niños una botella vacía es el juguete mas divertido de todos.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Lo que me gustó de ella fue su simpleza. Todo parecía caerle bien, cuando su madre decía algo y ella simplemente lo hacia, sin preguntar, quejarse ni nada.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Vi a su madre mirar el reloj en su muñeca, y a continuación se alejaron a paso acelerado.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Divagué con la mirada toda la plaza, no estaba atestada, pero no había tanta gente, lo cual me alegró. Eso era lo que daba el clima de calma.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Encontré que una señora, de unos 40 y tantos años estaba en la misma situación que yo. Sentada, sin ninguna preocupación, mirando pasar el tiempo. Supongo que ella tenía derecho, cualquier problema que ella pudiera tener seria más importante que el mío.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Hice una mueca, tanta gente con tantos problemas, y yo… que desperdicio.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Se me vino en la mente el rostro de Liam. Seguro le molestó esto mismo que me acabo de dar cuenta.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Siempre va a tener la razón.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
De repente mi mente recordó el sueño. El latido de mi corazón se aceleró y empecé a sentir un calor en el rostro.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
¿Qué me pasa? Fue sólo un sueño.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
─Hola ─mi corazón se detuvo, ¡Que cambio! Me quede congelada, era una voz que se me hizo familiar, sin embargo el susto me invadió.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
En un segundo el tiempo pasaba más lento que nunca, y ahora empieza a pasar volando.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Estaba tan distraída que en ningún momento sentí acercarse a nadie, y me di un buen susto. La realidad es que, el susto proviene mas por el tono y la semejanza de voz a alguien, mas que el susto de pillarme desprevenida.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
No quería mirar, no importaba que me equivocara, y pasara vergüenza. Sólo no quería arriesgarme.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Así que dirigí mi mirada a la hierba bajo mis pies, con un claro signo de terquedad en que no iba a mover esta postura.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
─Mmm… ¿Estás bien? ─dijo.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Dio un vuelco total, esto se convirtió en pesadilla. No podía equivocarme, no podía. Era su voz, un poco más grave y amplia, pero era su voz.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Estaba aturdida, no lo podía creer, era imposible. </div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Esto tendría que ser otro sueño, si, eso debe ser.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Mi acompañante se puso frente a mí. Y yo no me moví ni un centímetro.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Ya no podía centrar mi vista al suelo. </div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Vi unas zapatillas deportivas de buena marca, un tanto escondidas bajo un pantalón baquero a medida. El pantalón tenia un detalle de desgaste al frente, y oscuro a los costados.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Enfoque mi vista al movimiento, puesto que las rodillas poco a poco se empezaban a marcar en el pantalón.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Esta persona se estaba poniendo en cuclillas para ver mi rostro.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
No podía hacer nada, ¿Qué iba a hacer? Estaba congelada. Además una parte de mi quería acabar con todo esto.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Si, no me había equivocado. Era él. </div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Ryan.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Esta ahí, en persona, frente a mi, en cuclillas.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Estaba cambiado. Sus ojos más rudos, y más amables a la vez. Sus facciones cambiaron totalmente, ya eran las de un hombre y no las de un chico. Su cabello, ¡OH! ¡Su cabello!</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Desapareció. Su cabeza estaba sólo cubierta por una fina capa de cabello castaño claro.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
─Hola ─sonrió para darme ánimos. ─¿Estás bien? Pareces… desorbitada. ─agregó, probablemente no era la palabra que quiso decir, pero ya qué.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
─No. ─logré por fin decir algo.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
─¿No estás bien? ¿Qué tienes? ¿Qué te duele? ─dijo cambiando su rostro a preocupación.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
─No, no ─estaba atontada, no podía darme a entender. ─No a vos, a tu persona </div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
No se si entendió, pero yo me levanté, recuperando mi movilidad, y caminé sin saber a donde ir, pero caminaba en paso firme como si lo supiera.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
─¡Em! ─gritó a mis espaldas.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Se me vinieron unas ganas de darme vuelta y decirle que no me llamara así. Pero no hizo falta. Sentí una mano fuerte en ambos brazos y giré bruscamente quedando frente a él.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
─No hagas esto ─suplicó ─He estado hecho un idiota todo este tiempo, y todo es porque no estoy contigo. Te vi ahí sentada, y dije que el destino me envía a estar junto a ti. Ya te he visto otras veces, y en todas se me ha parado el corazón. Me dan ganas de volver el tiempo atrás, y haber tenido la inteligencia, madurez o como quieras llamarlo, para no dejarte. ─hizo una pausa. No se si esperando una respuesta o qué. ─Estoy arrepentido ─prosiguió.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
─Suéltame ─dije seria. Pero cuando obedeció se me escapó una sonrisa grande y ancha. </div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
Él la tomó como felicidad por su vuelta, y sonrió también.</div><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br />
─Nunca deje de pensar en ti. Nunca te olvidé. Nunca dejé de amarte. ─Sentenció.</div>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-79694113112081539342010-12-10T21:32:00.000-08:002010-12-10T21:32:44.881-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://4.bp.blogspot.com/_5TFgwPDfLJY/TQMMm0g6FCI/AAAAAAAAAAw/KswtlmPmpgM/s1600/10662969_gal.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="http://4.bp.blogspot.com/_5TFgwPDfLJY/TQMMm0g6FCI/AAAAAAAAAAw/KswtlmPmpgM/s320/10662969_gal.jpg" width="231" /></a></div> No he encontrado nada mejor,... asique<br />
Les presento..<br />
Liam!Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-27464632662945791602010-12-04T22:22:00.000-08:002011-02-17T19:28:03.331-08:00Capitulo 5<div style="text-align: justify;"><span lang="ES-AR"><i>Era la fiesta de alguien en la escuela que no recordaba su nombre, pero no importaba tampoco. Eso no era lo que importaba.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> La casa era elegante, todo de madera costosa, con ventanales por donde quiera que se vea. Había cuadros de muy buen gusto en los lugares exactos, todo encajaba perfectamente. También parecía todo muy delicado, me daba miedo moverme bruscamente y romper algo. </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Me encontraba rodeada de gente que en la vida había visto, sin embargo me resultaban conocidas.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Estaba en la “barra” -creo que se le puede llamar así, después de tanto lujo, ¿Por qué esta gente no iba a tener su propia barra en su living?-, en mis manos tenia un vaso estrecho, pero alto, tenia una bebida alcohólica que me gustaba, supuse que era Sex on the Beach. Mire a mi costado y vi a Helen, mi mejor amiga, que estaba con la mirada perdida en la gente que se agrupaba para bailar.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>¿A quién le hechas el ojo? </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>pregunté divertida por su expresión. Supuse que estaba imaginando cosas, como era su costumbre en cuanto veía alguien interesante.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Ella sonrió ante mi pregunta, y seguramente porque había acertado.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>En la otra punta, ¿ves? Remera bien ajustadita a esa crueldad para mi,... bueno…-se detuvo para no seguir, yo me reí con ganas y ella prosiguió. </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>jeans oscuros, moreno. Por favor, párame cuando quieras, ¿eh? ¿No te das cuenta que se me cae la baba?</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Si, si </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>Dije entre risas. </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>Disculpa, me perdí en tu descripción. Ya lo veo, no está nada mal.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Me miró con una mirada seria, casi de perrito mojado.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>No puedo hacerlo sola, ¡ayúdame! </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>Pidió</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>¡¿qué?! No, no… pero… ¿qué quieres que haga? ¿Ir y decir, “hola, a mi amiga se le cae la baba por ti”? Estas loca. </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>Declaré</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>No, no seas tonta. Sólo quiero bailar con él, y lo demás queda para el destino. </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>Se estaba molestando porque veía por si misma que no iba a hacer semejante ridiculez. Sin embargo, mientras ella hablaba, le pedí al cantinero más de lo que estaba tomando.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Aquí tiene </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>dijo con extremo interés, que no presté atención.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Miré a mi amiga que tenia la cabeza gacha por mi rechazo.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Bufé teatralmente para llamar su atención.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Ella me observó atentamente con la esperanza en sus ojos castaños. </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Levanté ambas cejas como signo de que siguiera cada paso. Me llevé el vaso a la boca, y bebí hasta el fondo su contenido. Quedé un poco estúpida, pero en fin, crucé la habitación en dirección al “</i></span><span lang="ES-AR"><i>moreno” sin nombre, por ahora.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Me hice la distraída y me detuve cerca de él.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> A continuación, hice lo primero que se me pasó por la mente.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Lo miré intentando parecer que lo conocía, hasta que se fijó en mí.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Yo te conozco </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>dije extrañada de haberlo encontrado aquí.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Mmm… No lo sé </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>Dijo pensativo, intentando recordar mi persona.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Bueno, en realidad no a mí. Pero si alguien especial. </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>Decía lo primero que se me ocurría.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>¿Sos pariente de alguien que conozco? </i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> No sé porque, pero me quedé en blanco. </i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Voy a empezar de nuevo </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>respondí con una sonrisa tonta en los labios. </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>Si te conozco, por supuesto, ¿cómo no conocer el hombre que le robó el corazón a mi mejor amiga? </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>¡Que vergüenza!, me estaba poniendo en ridículo a mi misma, sentía como la sangre subía rápidamente a mis mejillas.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> El tipo estará pensando que estoy bien borracha. Lo peor de todo es que la entera situación me causaba risa, pero la contuve para no arruinarlo todo.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Al comprender a qué me refería, sonrió.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Al no obtener respuesta, me puse más roja todavía, hubiera parecido un tomate a los ojos del “moreno”.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>¡Vamos! </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>reinicie la conversación, que no se porqué se había acabado incómodamente. Miré a donde mi amiga esperaba y moví la cabeza en señal para que viniera. </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>Es una fiesta y hay que divertirse, ¿no? Además ella es preciosa. Me das las gracias luego. </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>hice lugar para que Helen se incorporara entre nosotros.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Hola </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>dijo tímidamente Helen.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Ella es Helen. Helen, el es… es… </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>No me di cuenta que ni siquiera le pregunté su nombre. Era tan patética, que el “moreno” quiso salvar mi pobre intento de ser intermediaria-Cupido.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Soy Derek </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>respondió.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Listo, mi trabajo terminó. Así que me retiré disimuladamente.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Cuando me retiraba, volteé para dar media vuelta. Y me tropecé con alguien.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Lo siento</i><i> </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>me apresuré a decir, y cuando levante la vista, era Liam.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>No hay problema, </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>respondió sonriendo </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>en tanto bailes conmigo.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> De repente me agarró con una mano la cintura, y la otra en el hombro. No pude escapar, por supuesto.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Bailaba lento, totalmente descolocado a la música que tocaba, que por el contrario, era movida.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Estás muy linda hoy </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>dijo en tono seductor.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> La música cambió por completo y de repente estábamos bien a su compás.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>¿Qué estás diciendo? </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>dije sonriendo por el cumplido.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Podría decir muchas cosas sobre ti. Pero antes, me parece mejor hechos, que mil palabras </i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Rodeó con ambos brazos mi cintura, lo que lo acercó mucho más a mí.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> </i></span><br />
<span lang="ES-AR"><i> Se fue acercando más y más a mí, hasta tener su rostro a escasos centímetros del mío, podía hasta sentir su calida respiración.</i></span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> ***</span><span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Desperté agitada, tirando las almohadas por cualquier lado.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Suspiré.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Nada tenia sentido, ¡por supuesto!</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Fue un sueño.</span><span lang="ES-AR"> Hice una mueca ante el hecho, y fue doloroso. Sentí todo el lado izquierdo hinchado. Cierto, recordé lo de anoche.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Salté de la cama, alcé las almohadas, para no tropezar, y me dirigí al espejo.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Encontré la cara de una chica pálida, asustada y con la mirada en el pasado.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Voy a cambiar eso.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> Hoy voy a planear un viaje, con destino desconocido.<br />
<br />
***<br />
<br />
Miraba por la ventana del colectivo como el paisaje se iba poco a poco.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> El destino me enviaria al lugar que le apetezca.</span><br />
<span lang="ES-AR"> </span><br />
<span lang="ES-AR"> No me importaba tampoco, ya estaba conforme con solo alejarme de el hueco negro que es mi casa.</span></div>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-86401662481614575182010-11-13T16:00:00.001-08:002010-11-13T16:00:38.576-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://1.bp.blogspot.com/_5TFgwPDfLJY/TN8mTuy0XwI/AAAAAAAAAAk/CVp89oOlCkE/s1600/Ashley.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" px="true" src="http://1.bp.blogspot.com/_5TFgwPDfLJY/TN8mTuy0XwI/AAAAAAAAAAk/CVp89oOlCkE/s320/Ashley.jpg" width="278" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">Ashley</div><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/_5TFgwPDfLJY/TN8mXlAMZnI/AAAAAAAAAAo/NAeqdOvyKGQ/s1600/Emily.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" px="true" src="http://3.bp.blogspot.com/_5TFgwPDfLJY/TN8mXlAMZnI/AAAAAAAAAAo/NAeqdOvyKGQ/s320/Emily.jpg" width="227" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">Emily</div><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/_5TFgwPDfLJY/TN8mb47I5LI/AAAAAAAAAAs/sbCjMaQW83o/s1600/Ryan.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" px="true" src="http://3.bp.blogspot.com/_5TFgwPDfLJY/TN8mb47I5LI/AAAAAAAAAAs/sbCjMaQW83o/s320/Ryan.jpg" width="213" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">Ryan</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">Buscando al perfecto Liam!!</div>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-88469882575892007792010-11-13T15:58:00.000-08:002011-02-17T19:33:33.118-08:00Capitulo 4<div style="text-align: justify;">─<span lang="EN">¿De dónde venís?, ¿a dónde te crees que estas, te crees que vas a hacer lo que quieras acá? </span>─<span lang="EN">dijo elevando la voz cada vez que pronunciaba cada una de las palabras.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Lo miré a la cara, y me dio vergüenza ser hija de ese que estaba ahí sentado, con ganas de buscar pleitos. Porque el muy sinvergüenza estaba ebrio.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">Ese no es tu problema</span>─<span lang="EN"> respondí sin muchas ganas y dirigiéndome a mi habitación como si en realidad, el que estaba ahí hablándome, no era mi padre sino mas bien uno cualquiera.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">¡¿Qué no es mi problema?! </span>─<span lang="EN">creo que lo exasperé </span>─<span lang="EN">¡Entras y salís de esta casa como si fuera tuya, andando por ahí como si fueras dueña de tu propia vida! </span>─<span lang="EN">Rió irónicamente al decir las palabras “dueña de tu propia vida”. </span>─<span lang="EN">No tienes ni la mas minima idea de lo que eso significa, mal agradecida. Te doy un techo, comida y ¡esto es lo que me devuelves!. </span><br />
<br />
─<span lang="EN">¡Tú! ¡ja! Vos no me diste ni la mitad de cosas de las que tengo. MI mamá es la que se preocupa por mi. ─</span><span lang="EN">Mi papá se iba poniendo más y más rabioso, se estaba levantando acercándose a mi, con esos ojos suyos ardiendo en ira. Y pues, para rematar la situación agregué. </span>─<span lang="EN">¡Es la única! Asíque no me vengas con eso del techo y la comida, porque tu única preocupación es juntar plata para gastártela en alcohol, ¡Borracho! </span><br />
<br />
<span lang="EN"> Su cara de incredulidad era tan grande que me hizo pensar en lo que había dicho. </span><br />
<br />
<span lang="EN"> Nos quedamos mirándonos las caras, como si fuera la competencia de ¿Quién se parece mas al perro rabioso?</span><br />
<br />
─<span lang="EN">¡Ah! </span>─<span lang="EN">Exclamé.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> El muy desgraciado estampó su mano en mi cara.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Sentí un entumecimiento en el lado izquierdo de mi cara. Y todavía no lo podía creer, me había dado un muy buen cachetazo.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Lo miré y no había el menor atisbo de arrepentimiento. De hecho me miraba expectante para ver si me había hecho el daño que esperaba.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">Púdrete. </span>─<span lang="EN">dije muy calma.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> No iba a demostrar ni un poco de miedo ante él. Antes de dar la media vuelta, para encerrarme en mi habitación, pude ver la decisión en sus ojos de golpearme una vez mas.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Supuse que se arrepintió porque al seguir camino a hasta mi puerta no sentí o escuche nada.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Cerré con trabas la puerta para que nadie entrara.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Lo primero que hice fue mirarme en el espejo, que tenia en mi escritorio, si tenia algo. La verdad que no se veía nada pero se sentía hinchado por dentro, y con ese sabor inconfundible a sangre, aunque no me había lastimado hasta ese punto, sin embargo el sabor estaba en mi boca.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Estaba enojada, se suponía que no tendría que estar acá. </span><br />
<br />
<span lang="EN"> Había tenido el día mas extraño de todos, empezando con el pie izquierdo. Liam no me iba a hablar más, de hecho ya se había conseguido “otra”.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Estuve pensando cosas que no debía. Pero, aunque no lo crea, me sentía mejor. Me sentía renovada, y esto era debido al hecho de haber sacar todo eso dentro de mi que me estaba acabando. No voy a negar que me hubiera encantado decírselo a la cara. Ryan fue como el amor de mi vida, y no fui suficiente, por lo menos no lo suficiente para retenerlo. Había callado, guardado todos esos momentos para no olvidar ninguno, sin darme cuenta que fue peor. Tenia la esperanza de que volviera, porque ninguna lo podría amar tanto como yo, porque ninguna hubiera hecho por él tanto como yo.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Me había cerrado por completo a toda idea de olvidar, y cuando quise olvidar, porque sabia que no iba a volver, no pude.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Ahora, la tercera opción es, intentar vivir con ello.</span></div>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-27956629357275667182010-11-06T14:56:00.001-07:002011-02-17T19:50:07.168-08:00Capitulo 3: Emily<div style="text-align: justify;"><span lang="ES-AR">Estaba frente a la puerta de mi casa, indecisa. No sabia si entrar, o simplemente irme a vagabundear como tantas veces había hecho.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Pero puesto que ya estaba frente a la puerta de mi casa, decidí entrar.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Me llamó la atención que la habitación del living estaba mas iluminada de lo usual. Como si todo estuviera mas claro y limpio. Las ventanas estaban abiertas de par en par, y sentí como una pequeña brisa entraba dando calma al lugar.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Era extraño, y lo mas probable, era que siempre hubiese sido así, sólo que ni siquiera lo había notado antes.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Seguí camino hasta llegar a mi habitación. Y con esta “nueva” percepción, pude darme cuenta que era un desastre. No porque estuviera sucia, o porque estuviera desordenada, sino mas bien porque metafóricamente estaba vacía. Con esa sensación que se siente cuando un pariente fallece, y para recordarlo se visita un lugar especial donde halla quedado su marca, pero al llegar al lugar, se siente vacío.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Así se veía mi habitación, vacía.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Me entristeció saber que estaba desapareciendo. Y que alguien mas estaba ocupando mi lugar.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Me sentí una perdedora, una persona que estaba batallando sin darse cuenta y que claramente estaba perdiendo. </span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Di un pequeño salto de susto al escuchar a mi hermano atrás mío, no sabia que estaba en casa, y si lo hubiera sabido, lo mismo me hubiera asustado, puesto que estaba ensimismada.</span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR">¿Dónde está mamá? </span>─<span lang="ES-AR">preguntó divertido al darse cuenta que me había asustado.</span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR">No sé, ¿no te das cuenta que recién llego? </span>─<span lang="ES-AR">Al ver su cara me hizo avergonzar de haberme asustado. <br />
Sin decir nada mas, se encerró en su habitación.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Tenia hasta las 18hs para hacer mis cosas, puesto que a las 18:30 llegaba el que se hacia llamar como padre.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Tiré las cosas encima del escritorio, y me eché en la cama.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Quisiera o no, los pensamientos iban a fluir en un momento o en otro, así que los deje fluir sin esforzarme siquiera en filtrarlos, y pensar en cosas que no fueran “malas”.</span><span lang="ES-AR"><i> Hoy Ryan tenia que esperarme en el club. Mas temprano, por supuesto, así tendríamos tiempo para nosotros antes de que llegaran nuestros amigos.</i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Llegué del colegio, e inmediatamente empecé a revolear ropa por acá y por allá, hasta encontrar la que me iba a poner esa tarde después de bañarme.</i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Entre idas y vueltas ya eran las 18hs, asíque agarré un bolso que tenia a mano y salí apurada.</i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Tenia que apurarme porque mi papá estaba saliendo mas temprano temporalmente, y para evitar problemas, entre los horarios que permanecía en casa, yo desaparecía.</i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Caminaba a paso de trote, pero quería estar lejos ya a esas horas.</i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Me faltaban un par de calles cuando me percate de que alguien me llamaba.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>¡Em! </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>tenia voz agitada, como si estuviera corriendo desde varias calles anteriores.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>¡Emily! </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>Me detuve porque reconocí la voz.</i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Ryan.</i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Al dar la media vuelta lo vi ya caminando, a unos metros de mi. Parecía molesto por haber corrido atrás mío. Pero no pude darle importancia, puesto que su expresión me daba risa. </i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>¡OH, mujer! Me has hecho correr… </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>exclamó intentando regularizar su respiración.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Lo siento, no te he escuchado. </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>me disculpe sonriendo inocentemente.</i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Ryan ya estaba frente mi, colocando sus manos en mi cintura. Suspiró y puso su frente contra la mía.</i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Fue por un intervalo de tiempo muy corto, pero lo suficiente para ver en profundidad sus ojos. </i></span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"><i> Entonces me di cuenta que no estaba de muy buen humor, y que su molestia por correr iba en serio.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Pensé que ya estarías en el club </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>dije extrañada, para justificarme, y para así cambiar de tema.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Si, me estaba por volver, pues no he traído mi tarjeta. Pero luego te vi en la otra calle…</i></span> ─<span lang="ES-AR"><i>se quedó callado, dejando en claro lo que había pasado ahora. Por lo que completé su frase.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Me viste, y viniste a por mi. </i></span>─<span lang="ES-AR"><i>sonrió sin ganas.</i></span><br />
<br />
─<span lang="ES-AR"><i>Ven, vamos a otro lugar. </i></span><br />
<i></i></div><div style="text-align: justify;"><br />
<span lang="ES-AR"> Me sentí idiota, porque… ¿Cómo pude creer semejante tontería? ¡Todo estaba planeado! El muy </span><span lang="ES-AR">descarado no veía la hora de deshacerse de mi, ¿Quién le hubiere creído todas sus mentiras? Ni el mismo se creía toda la porquería que me había echado en cara.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Estaba tan molesta, que me levanté de un salto, y salí de mi casa en busca de un lugar. Un lugar que no me haría sentir mejor, pero si me haría creer que podía cambiar algo.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Mientras corría sentía como el aire me golpeaba en la cara, como mi cabello bailaba al aire, como mis músculos se calentaban.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Todas eran sensaciones que hacia tiempo no notaba, que estaban allí, pero que no les prestaba atención.<br />
Entré al parque bajando la velocidad. No había gente, por varias razones, porque era día de semana, y porque ya nadie tiene tiempo para cosas al aire libre. Todo había cambiado mucho, ahora la gente se sentaba frente a una pantalla y pasaba horas, sin siquiera notar la falta de aire fresco o un poco de luz.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Para mi era mejor, tenia todo el lugar para mi sola y para hacer lo que iba a hacer sin interrupciones o miradas extrañas.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Mis piernas me llevaron hasta el mirador, como esperando ese momento desde hace años. Me aferré a la baranda que separaba el vacío de la tierra debajo de mis pies.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Y grité. Le escupí al mundo todo lo que tenia que decir. Todo lo que me había guardado durante tanto tiempo. Todo lo que me estaba pudriendo el alma.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Maldije a esa persona que me había hecho sufrir tanto.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Y lloré. Lloré años de dolor guardado.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Trastabillando por el parque intentando escapar, di con un pequeño lugar lleno de árboles. Podía haber alguna persona ahí, y nadie lo hubiera notado, ya que eran árboles sauces, y por el tamaño, muy viejos.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Quedé encantada con el lugar, olvidando esas ganas de escapar. </span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Me adentre a los árboles y descubrí bancos para que la gente se sentara, pero supe que nadie iba a ir allí, puesto que para estas personas seria molesto que le caigan en la cara ramas de árboles. Mientras que a mi me encantaba, era como mi escondite perfecto.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Tenia que admitir que a la hora en que empieza a anochecer parecía un poco tenebroso, pero estaba totalmente segura que, de día o completamente a la luz de las estrellas seria de lo mas hermoso.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Se me fueron todos los pensamientos turbios, y por un momento olvidé lo infeliz que era.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Se sentía muy bien.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> La paz dura poco, volví a la realidad y ya era tarde. Por lo menos tarde para llegar a la hora que usualmente llego a casa. Así que me fui despidiendo de mi nuevo lugar escondite, si es que se podía llamar así.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Estaba tranquila, realmente lo que necesitaba era eso, descargarme. Sin embargo no lo arreglaba todo. </span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> La vida, el mundo y el tiempo no se habían detenido a esperarme que yo mejorara, porque yo creía que no iba a mejorar. Pero acá estaba, viviendo.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Luchando.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Luchando contra aquellos humanos que nos arruinan momentos. Nosotros mismos nos arruinamos. Nosotros mismos destruimos todo a nuestro paso.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Era cierto, yo dejé destruirme. Pero no me arrepiento de eso, no me arrepiento porque de no haberme dejado destruir nunca hubiera sabido lo que es amor, y lo que es vida.<br />
</span><br />
<span lang="ES-AR"> Estaba en frente de la puerta de mi casa, exactamente igual como hace un par de horas.<br />
</span><br />
<span lang="ES-AR"> Solamente que esta vez estaba mejor.</span><span lang="ES-AR"> Entré y lo encontré a mi hermano usando la computadora, me miró sin preocupaciones. Le devolví la mirada como queriendo decirle algo, pero no tenia nada que decir. Y el solo se limitó a volver la vista a la pantalla que tenia en frente.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Seguí hasta el comedor, en el cual estaba mi “papá” sentado mirando la nada. Hasta que aparecí en su visión.</span><br />
<br />
<span lang="ES-AR"> Había tomado de mas. Y claro, yo era la basura de la familia.</span></div>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-51239685467636861972010-10-27T00:33:00.000-07:002011-02-17T19:44:41.299-08:00Capitulo 2: Liam<div style="text-align: justify;"><span lang="EN">Caminé lento hasta mi casa.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Tomé el camino largo, para poder pensar en todo sin apuros y despejar mi mente.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> ¿Qué acababa de pasar? En serio, me comporte como un completo idiota, pero creo fue el impulso del momento. Y no sé de a qué me refería, si a la forma en que la abracé y la atraje hacia mi, o si a la forma en que le traté, como escupiendo las palabras y como si la pobre tuviera la culpa de todo lo que le pasa.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Incluso aunque todo lo que dije haya sido verdad. A veces no entiendo mis propios cambios de humor. </span><br />
<br />
<span lang="EN"> Pero, ¿es que ella en serio consideró hacerse daño a si misma? ¿es que lo amaba tanto? ¿a tal punto de hacerse eso, sólo porque no estaba con él?.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Me sentía mal, y no tenia idea de porqué. Fue la suma de todo lo que paso, o la gota que llenó el vaso.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Por culpa de mi de impulsividad tenia que tomar una decisión. Yo le había dicho que técnicamente no me hablara mas, aunque mis palabras no fueron exactamente esas.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Mis palabras fueron “cuando te vuelvas a dirigir a mi, lo haces como la persona que eras antes”. ¡¿Estaba loco?!, ¡la chica nunca volvería a ser como antes!. Entonces ahí encontraba el problema.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> ¿Qué hacia? ¿cumplía con lo que dije, y así poder tener una minima esperanza de que le importo y vuelva a ser alguien, aunque sea normal?.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> O… simplemente dejo atrás toda esperanza, y que todo quede cómo está, conformándome solo con lo que quedó de ella.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Definitivamente aunque me cueste llevarlo a cabo, iba a poner toda mi esperanza en que ella iba a mejorar un día, incluso aunque no fuere por mi, entonces que sea por ella misma.<br />
<br />
Se podría decir que yo era el tipo de chico simpático, el cual habla con todos. Por lo que no hubo ningún problema al irme con otros amigos, y no es que era como el nuevo que nadie conocía, sino que desde que Emily se separó de Ryan yo estuve pendiente mas de ella que de alguien más.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Asíque fuera de las horas de clases, yo estaba con ellos. Claro sin dejar de estar pendiente de Emily.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> La cual se la veía incomoda por momentos. A pesar de que a mi me costaba el doble de trabajo que a ella estar alejado, por momentos no podía reparar en sentirme un poco halagado. Ella sentía mi ausencia, y eso me hacia sentir -pensé cual seria la palabra correcta- satisfecho.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Así, como había momentos en los que me sentía halagado, también había esos otros momentos en los que me sentía insignificante, puesto que ella en esos momentos quería estar sola, y lo único que había logrado fue quitarle esa molestia que no la dejaba en soledad.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">¡OH Liam! Menos mal que decidiste salir de la oscuridad </span>─<span lang="EN">dijo a modo de chiste Ashley mientras se sentaba junto a mi, y alejaba una mirada feroz de Emily. No me había percatado que se pasó todo el rato mirándome para, seguramente, ver si sacaba la mirada de Emily. </span>─<span lang="EN">¿Vuelves al bando de los buenos? </span>─<span lang="EN">prosiguió para obtener mi completa atención.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Tenia una vista general conformada por un grupo de chicos y chicas, con todos sus ojos puestos en mi, y su entera atención a mi respuesta.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">¿Quieres decir que estos son los buenos? </span>─<span lang="EN">dije sonriendo con cara de incredulidad fingida, señalando a cada uno de ellos. </span>─<span lang="EN">¿Es que es el Apocalipsis? </span>─<span lang="EN">fingí terror por eso.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Se rieron de mi, y uno de ellos, Tyler, se levantó para venir hasta mi posición. Extendió su mano y agarró la mía para ponerme de pie y darme unas palmadas al hombro, como señal de bienvenida.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">Hermanos de vuelta. </span><br />
<br />
─<span lang="EN">Nunca dejamos de serlo Tyler. </span><br />
<br />
<span lang="EN"> La campana sonó para entrar de nuevo a clases. Ashley me tomó del brazo y me empujo para ir clases.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> No me soltó, incluso cuando empecé a caminar a su lado.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Tenia que volver a acostumbrarme a esto, porque de no ser así, estaba mal.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Estaba mal porque yo era así, y no podía ser verdad que haya cambiado tanto. Hasta incluso la chica que me atraía y me hacia volar la cabeza, ahora no me parecía mas que una mochila de piedras.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> A lo mejor sea porque es el primer día, o a lo mejor porque algo cambió en mi.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> A final de clases me apresuré a ser uno de los primeros en salir para poder ver que tal iba Emily con este “experimento”. Pero para cuando estaba a punto de alcanzar su clase, algo me hizo detenerme. Mire hacia mi costado y estaba Ashley con su sonrisa energizante.</span><br />
<br />
─<span lang="EN">¿A dónde vas corriendo? ¿Se te va la carroza? </span>─<span lang="EN">preguntó sin esperar una respuesta, sólo quería detener mi paso. </span>─<span lang="EN">Parece que hubieran pasados años desde la ultima vez que hablamos. Asíque, ¡te voy a contar la historia de mi vida!. Acompáñame. </span><br />
<br />
<span lang="EN"> No podía negarme, ni siquiera me dio elección.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> ¡Fue el camino más largo de la vida! Creo que por poco más, no me cuenta hasta lo que hizo su abuela.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> En los momentos en que preguntaba por mi, y por lo que había hecho. Siempre intentaba zafarme respondiendo de manera sutil otra cosa, que la hiciera reír o cualquier otra reacción que no se centrara en mi. Pero incluso aunque fui sutil, podría dar lo que sea, a que lo notó tan fácilmente como si fuera mal mentiroso. Pude verlo en su rostro, y en la manera en que cambiaba el tipo de preguntas, solo a mi favor.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Una vez solo en la calle, quería sentirme seguro. Fue como si todo ese día me hubiera sentido vulnerable o algo parecido.</span><br />
<br />
<span lang="EN"> Por lo que empecé a correr, sin detenerme a mirar o a escuchar a la gente que pasaba casi rozando.</span></div>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1082810062919659260.post-85051764252937952422010-10-26T20:28:00.000-07:002011-02-17T19:49:28.195-08:00Capitulo 1<div style="text-align: justify;">─¡Oye!, ¿qué haces? ─Liam me sacó de mi pequeño mundo creado para no sufrir tanto.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─¿qué? ─no entendía a que se refería, no estaba haciendo nada. </div><div style="text-align: justify;"><br />
Mientras se acercaba a mi, extendía sus mano hacia las mías, por lo que instintivamente las atraje hacia mi. Sin embargo, no le importó mi rechazo, y las tomó haciendo un gesto que no entendí.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Las miré y comprendí a que se refería.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Estaba respondiendo a mi pregunta.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Mis muñecas y antebrazos estaban sangrando, y mis dedos llenos de sangre.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─¿Qué crees que haces? ¿Cómo se te ocurre? ¿Es que no has pensado en el daño que causas? </div><div style="text-align: justify;"><br />
Yo no entendía nada, en ningún momento me acuerdo de haberme hecho eso yo misma, ni siquiera he sentido el dolor hasta que él me lo dijo.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─Yo… yo… ─Quise explicarle, pero ¿cómo le iba explicar algo que ni yo entendía?</div><div style="text-align: justify;"><br />
─¡Vamos! Me explicas luego. ─Su tono de voz, serio y autoritario, no me gustó en absoluto, pero le seguí porque todavía estaba en shock.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Yo si estaba sufriendo, si tenia ganas de desaparecer de todo, pero no tenia el coraje de hacerlo.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Asíque supongo que lo hice inconcientemente mientras estaba en un estado de ensoñación.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Liam me llevó a la enfermería del colegio, que no estaba muy lejos. Le dije a la enfermera q me caí y me había raspado con uno cristales que estaban en el suelo. La historia era muy creíble, puesto que las heridas podrían pasar muy bien como tal.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─¡Listo pequeña! Ahora, toma esto ─decía mientras tendía un frasco con un liquido amarillento y unas cuantas gasas ─Las gasas las tienes que cambiar seguido, así la herida sanará mas rápido y también para que no se infecte. </div><div style="text-align: justify;"><br />
─Muchas gracias ─Dije para no ser descortés, pero lo cierto es que no me interesaba mucho socializar.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─No hay problema, te cuidas, ¿si? ─dijo la enfermera con cara de preocupación, pero no exactamente por mi salud, sino mas bien por su trabajo. Se le podía ver en la cara que no le agradaba mucho tener que andar curando a un par de adolescentes inquietos que hacen lo que se venga en gana. Y yo no la culpaba, de hecho, tenia razón.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Le dedique una media sonrisa como respuesta, y salí de allí.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Iba ir a mi casillero a sacar una chaqueta para ponerme y que nadie notara nada, pero cuando crucé la puerta noté por el rabillo del ojo, que alguien estaba apoyado contra la pared esperando.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─¿Qué tal?. ─dijo Liam mientras se acomodaba a mi paso.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─Si, bueno.. He tenido días de ocio mucho mejores que este. Asíque para mejorarlo, me voy a mi casa. </div><div style="text-align: justify;"><br />
─La salida es por el otro lado ─dijo señalando con el dedo pulgar su espalda.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─Lo sé. ─dije de modo cortante en un intento de que acabara la conversación, pero luego lo mire de reojo ,y vi que hizo un gesto raro parecido al que uno hace cuando lo rechazan. Ese gesto me hizo sentir mal, e hizo que aminorara el paso. ─pero voy a buscar mi chaqueta para ponerme porque me ha hecho frío ─proseguí rápidamente para sacarme de encima ese sentimiento de culpa y pena.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Liam se quedo callado acompañándome, hasta mi casillero. Una vez que me puse mi chaqueta, seguí camino por el pasillo aunque ahora en dirección contraria.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Luego de unos segundos, miré a mi costado y estaba Liam allí, solo un paso atrás mío. Me miraba atento. Y eso me irritó un poco.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─¿qué? ─dije desviando la vista.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─Me debes una cierta explicación, o es que también tienes problemas de memoria. ─Esto último fue puro sarcasmo.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─No, no tengo problemas de memoria por ahora, pero creo que fue muy obvio lo que pasó. </div><div style="text-align: justify;"><br />
─Entonces… no hay un “muchas gracias Liam, por salvarme mi vida, eres todo un héroe” ─Dijo parodiando con voz mas aguda.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Yo me reí para mis adentros, porque no quería darle con el gusto.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Al ver que no hubo respuesta alguna por mi parte continuó.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─¡Que humor, por dios! Te cobraré horas extras por servirte de bufón. ─Dijo poniéndose serio, para tantear que tan malhumorada estaba.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Yo no pude mas, asíque le dedique una sonrisa con falta de gracia, pero en fin, una sonrisa honesta.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─Oye, escucha ─dijo interponiéndose en mi camino. ─No me gustó nada lo que vi hace poco, ¿OK? Y ya estoy mas que enfermo de verte sufrir por alguien que no lo merece, ¿entiendes? ─pude ver en sus relucientes ojos como el cielo, que me estaba hablando con el corazón. ─Así que, vete a casa y piensa todo lo que quieras, tomate el tiempo que pienses que es necesario, pero cuando te vuelvas a dirigir a mi, lo haces como si fueras aquella persona feliz y dulce que eras ─mientras el decía todo esto, mi rostro se iba empapando en lagrimas que ya no podían quedarse guardadas por mas tiempo. ─hay un tiempo para todo, y el tiempo de que sufras por ese imbécil de Ryan se ha terminado. </div><div style="text-align: justify;"><br />
Lo que estaba diciendo tenia sentido, y probablemente tenia razón, pero era difícil olvidarlo todo.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Lloraba a más no poder, supongo que por esa razón Liam se compadeció de mi, y me abrazo fuerte. Como si la fuerza de su abrazo dependiera de la magnitud del dolor. Me agarré de Liam como si dependiera de su abrazo para no caer.</div><div style="text-align: justify;"><br />
Después de tanto tiempo, me sentí consolada.</div><div style="text-align: justify;"><br />
─Te acompaño ─susurro cerca de mi oído.</div><div style="text-align: justify;"><br />
De una manera delicada cambio de postura para poder caminar y seguir abrazándome, y llevarme por fin a mi casa.</div>Eugeniahttp://www.blogger.com/profile/11869918989011938312noreply@blogger.com2